La pareja fingió que su hija había muerto abordo de un autobús
La autopsia reveló que la niña murió a causa de múltiples lesiones en todo el cuerpo
Rosalin Baker de 25 años de edad y su esposo Jeffrey Wiltshire de 52 años, fueron condenados a 14 años de prisión por ocasionar la muerte de su hija de tan solo tres meses de nacida.
La pareja planeó el momento en el que revelarían la muerte de su pequeña hija Imani Wiltshire a bordo de un autobús.
Los hechos fueron captados en un vídeo dentro de la estación Stratford, en Londres, en él se aprecia el momento en el que los dos entran a un autobús con una carriola, pero quien carga Imani es su madre, quien segundos después comienza a gritar desesperada que su bebé no responde.
“El bebé no responde”. “La mamá dice que el bebé estaba bien”, dijo un elemento de seguridad que corrió a auxiliar a la pareja. “El bebé no se despierta, no está bien”, volvió a decir Baker.
Luego de muchos intentos los elementos de seguridad del autobús informaron que la menor ya estaba muerta.
Tras siete meses de lo ocurrido, el juez Nicholas Hilliard declaró culpables a la pareja británica por el delito de asesinato de su hija.
La autopsia reveló que la menor murió 24 horas antes de que los padres se entregaran a la policía, que la niña falleció por múltiples lesiones en el cuerpo: 40 fracturas en el cuello, una muñeca quebrada, el cráneo y el brazo; además de que fue apretada de su pecho y lanzada contra el suelo.
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