Las mujer solicitó a sus invitados mil 500 dólares por persona y 5 mil a cada una de sus damas de honor
Al ver la poca respuesta de sus amigos y familiares, la novia canceló el compromiso
Una joven, llamada Susan, decidió cancelar su boda porque los invitados no decidieron apoyarla con los mil 500 dólares que exigió por persona para poder pagarla.
La novia compartió su historia a través de Facebook y de inmediato se ha hecho viral, ya que la joven culpó a sus conocidos por no haberla apoyado a cumplir su sueño.
En la publicación, Susan pidió perdón por avisar con cuatro días de anticipación que la boda se cancelaba. “Les invito a que lean el por qué para que se pongan en mis zapatos”, escribió.
De acuerdo con su relato, ella y su novio conocieron a los 14 años, se comprometieron a los 18 y tuvieron un primer hijo a los 20.
Desde entonces, habían estado ahorrando para la boda de sus sueños, pero el dinero no parecía suficiente. El festejo que ella quería costaría 60 mil dólares, pero ellos solo habían reunido 15 mil.
Antes este panorama, Susan decidió pedir como “regalo” mil 500 dólares a cada amigo y familiar, pero a las damas les exigió 5 mil dólares y a sus suegros 3 mil.
“Todo lo que pedimos fue una pequeña ayuda de nuestros amigos y familiares. Fuimos CLAROS. Si no podías contribuir no estabas invitado a nuestra exclusiva boda”, detalló la joven.
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⃤ ⃤ (@grumpstorm) August 25, 2018
Al ver la poca respuesta que tuvieron de sus invitados, de acuerdo con Noticieros Televisa, la mujer decidió cancelar la boda, ya que solo ocho personas le enviaron un cheque. Incluso una dama de honor desistió del cargo por no tener el dinero suficiente.
“¡¿Cómo alguien que me ofreció MILES DE MALDITOS DÓLARES me niega el dinero prometido y luego me dice que cambie mi presupuesto?!”, sentenció la novia.
Como último recurso, la joven solicitó menos dinero a los invitados, pero no recibió nada. Entonces decidió recaudar fondos a través de una página de Internet, de la cual solo obtuvo 250 dólares.
En ese momento su novio le sugirió una boda rápida y sencilla en Las Vegas, pero ella se molestó tanto diciéndole que “jamás se casaría en un lugar de alcohólicos, prostitutas y adictos a las apuestas”, y canceló el compromiso.
“Yo sólo quería ser una Kardashian por un día y luego vivir mi vida como siempre. ¿Tan difícil era regalarme el maldito dinero?”, concluyó Susan en su publicación.
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