Trump culpa a “ambas partes” de los disturbios recientes
Se especula que la tibieza en sus declaraciones se debe al apoyo que recibió de grupos de ultra derecha durante su campaña
El viernes por la noche, grupos de ultraderecha se manifestaron con antorchas para protestar por la retirada de una estatua de Robert E. Lee, general del Ejército Confederado durante la Guerra Civil. Lee fue quien rindió las tropas sudistas ante el general Ulysses S. Grant en 1865, poniendo fin así a la Guerra de Secesión.
En el incidente murió una mujer de 32 años y otras 19 personas resultaron heridas al ser embestidas por un vehículo el sábado en Charlottesville, en medio de las protestas.
El auto iba conducido por un joven de simpatías neonazis, supuestamente participarte en esas marchas del fin de semana. Antes del atropello, que la policía consideró intencionado, el enfrentamiento entre los supremacistas y la contramanifestación antirracista había derivado en fuertes disturbios.
Antes estos hechos el martes, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, compareció ante la prensa en Nueva York donde habló sobre los movimientos supremacistas blancos y las protestas antirracistas recientes.
El republicano recalcó que los disturbios en Charlottesville, Virginia ,”fueron culpa de ambos bandos”.
“Había gente mala en un lado y también muy violenta en el otro”, insistió.
Luego de una marcha de grupos de ultraderecha, neonazis y Ku Klux Klan, misma que derivó en un enfrentamiento, el presidente norteamericano fue ampliamente criticado por su tibia respuesta del sábado, cuando condenó la violencia “de muchas partes”.
Uno de los que marcharon era David Duke, exlíder del Ku Klux Klan, quien agradeció las últimas palabras del republicano: “Gracias, presidente, por su sinceridad y su coraje para decir la verdad sobre Charlottesville y condenar a los terroristas izquierdistas en BLM/Antifa [en referencia al movimiento Black lives matter y antifascista]”
Las críticas hicieron que el magnate corrigiera sus palabras, y el lunes rechazó a los grupos extremistas explícitamente.
De acuerdo con una nota de El País, este martes en el vestíbulo de la Torre Trump, durante un encuentro con los medios de comunicación, el mandatario expresó:
“He condenado a los neonazis, he condenado a muchos grupos. Pero no toda esa gente eran neonazis, o supremacistas blancos, ni mucho menos”, subrayó.
“Fue un momento horrible para nuestro país, pero hay dos lados en esta historia”, repetía el presidente.
Durante su comparecencia, este martes, Trump justificó sus palabras cuando no mencionó a los racistas, los neonazis o el KKK y simplemente culpó de lo sucedido a la violencia y el odio de “muchas partes”. Justificó que no quería hacer una declaración apresurada sin tener toda la información.
La equidistancia de Trump, su incomodidad en la condena, se explica en buena parte por el apoyo que grupos de ultraderecha, fascinados por su vertiente nacionalista, le han brindado desde su campaña electoral.
Ante estos tropiezos en las declaraciones de Trump las críticas no han cesado. La Federación Estadounidense del Trabajo (AFL-CIO), la mayor central obrera de Estados Unidos, anunció que abandona el consejo de empresarios creado por Donald Trump como gesto de repulsión hacia la ambigua respuesta del presidente al asesinato de la manifestante antifascista Heather Heyer.
“No puedo sentarme en un consejo para un presidente que tolera el fascismo y el terrorismo doméstico. Los comentarios formulados por el presidente han borrado sus forzados comentarios de ayer contra los neonazis y el Ku Klux Klan”, afirmó el presidente de la AFL-CIO, Richard L. Trumka en un comunicado.
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