Manejar es estado de ebriedad constituye un delito que, dependiendo de la ciudad y el estado de la república en el que se encuentre el conductor, lo hace acreedor a una multa que va de los 2 mil a los 20 mil pesos.
Para combatir esta práctica, es que existe el alcoholímetro, que es un dispositivo que mide la cantidad de alcohol que hay en la sangre y que permite determinar si un conductor es apto o no para manejar un vehículo.
En redes sociales y de boca en boca circulan una serie mitos para “engañar” al alcoholímetro tales como: comer un mazapán, hiperventilar, masticar chicle o beber jugo de tomate.
En este video te mostramos que tan efectivos son estos consejos.
Sé parte de la conversación