El pasado sismo es como “un déjà vu del terremoto de 1985”, asegura
Celebra la solidaridad de la ciudadanía mexicana que salió a las calles a prestar ayuda tras el terremoto
Jorge Ramos, presentador del Noticiero Univisión, ha sido galardonado con el Reconocimiento a la Excelencia de los premios Gabo 2017, que se celebran esta semana en Medellín, Colombia.
Ramos trabaja desde hace más de 30 años en Estados Unidos, por lo que se ha convertido en defensor de los derechos de la sociedad hispana en dicha nación.
Luego del terremoto del pasado 19 de septiembre en México, el presentador habló acerca de la reacción solidaria de la sociedad mexicana y consecuencias para las autoridades, producto del descontento ciudadano.
En entrevista con El País, Ramos considera el pasado sismo como “un déjà vu del terremoto de 1985”.
“Ante los enormes vacíos del Gobierno, los ciudadanos han salido solos y se han organizado, y así como el terremoto del 85 precedió las primeras elecciones democráticas en México en el año 2000, este va a tener consecuencias en muchas otras cosas”, dice.
Asegura que la falta de acción por parte de las autoridades ha hecho que los ciudadanos ya no esperen permiso e instrucciones del gobierno para movilizarse, pues el gobierno ha perdido total credibilidad.
Esta falta de credibilidad se ve acrecentada luego de la falsedad del rescate de la niña “Frida Sofía”, que tras comprobarse que no existía hace casi imposible que la gente confíe en el gobierno. Sin embargo no es el único caso, pues a lo largo de la administración de Peña se han acumulado errores que dejan como resultado la desconfianza de los ciudadanos.
“Es Imposible. No le puedes creer la versión sobre los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, sobre la compra de la Casa Blanca por parte de su esposa, no puedes creerle nada más, se acabó. El terremoto ha dejado tan clara la poca credibilidad y la falta de respuesta de los políticos tradicionales”, dice Ramos.
En contraste, aplaude la reacción de los ciudadanos y destaca que “nunca he visto un pueblo más solidario, más arriesgado, con mejor iniciativa. Los millennials que tanto critican de México han dado una muestra de capacidad y de entrega extraordinarias”.
Sobre la situación de los mexicanos en EU, asegura que “las cosas están peor que nunca y mi referencia es cuando llegué a este país en 1983. Nunca he visto un clima antiinmigrantes, de odio, tan intenso como ahora, y lo que esperábamos se ha ido concretando. Estamos ante el presidente más xenófobo en décadas, se nota y lo vemos en absolutamente todo”.
A pesar de haber divisado la situación de racismo desde inicios de campaña de Donald Trump, comenta que nadie hizo nada, y para cuando se pretendió actuar ya era demasiado tarde, pues el republicano ya era presidente.
En ese momento lo preocupante fue que “el ataque iba en contra de inmigrantes mexicanos, la parte más vulnerable de los EE UU”.
Aunque la reacción tardó en llegar, según el presentador hay ahora en Estados Unidos “un periodismo muy crítico”.
“Basta ver las páginas de The Washington Post y de The New York Times peleándose por exclusivas y atacando duramente a Trump. En todos los medios, tantos digitales como en televisión, hay una verdadera resistencia. Me parece que llegó tarde, insisto, porque nos debieron haber acompañado en esta resistencia desde el 16 de junio de 2015 y no lo hicieron. Pero el día que llegó a la Presidencia tuvieron una actitud muy valiente y decidida de resistir y cuestionar en todo a Trump”, dice.
“Yo creo que nuestra principal responsabilidad social es cuestionar a los que tienen el poder, obligarlos a rendir cuentas y perseguirlos hasta que se sepa la verdad, para eso sirve el periodismo”, explica.
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