El estrés, la falta de comunicación y la rutina son de los principales factores que afectan el deseo sexual
Especialistas recomiendan mejorar la comunicación e intentar nuevas cosas para salvar la relación
La ausencia del deseo es la disfunción sexual más frecuente, tanto en hombres como en mujeres. En una relación de pareja es normal que conforme avanzan los días, se enfrenten a problemas que deben resolver juntos.
Uno de los más frecuentes es la reducción del deseo sexual, de una o ambas partes, ya sea por desinterés, agotamiento, estrés o porque se hacen víctimas de una rutina en la que dejan de lado el placer.
El estrés es uno de los principales factores que intervienen en la falta de deseo sexual, debido a que en el organismo aumenta la cantidad de hormona cortisol, por lo que la producción de testosterona baja y el deseo sexual disminuyen.
Otro factor que interviene en los problemas sexuales de una pareja, son las discusiones o problemas de trabajo, con los niños, la familia o la escuela que hacen que las preocupaciones se atraigan a la cama, provocando que ambas partes no den el primer paso para resolver sus indiferencias.
La rutina es un factor principal que puede terminar con el deseo sexual. La cuestión de hacer siempre lo mismo en la intimidad ocasiona que las dos personas se aburran y pierdan el interés por estar con el otro.
Antes esta problemática, especialistas recomiendan adquirir nuevas posiciones, técnicas y métodos más placenteros que enciendan la llama de la pasión.
Las enfermedades también son un factor que influye, por ejemplo la disfunción eréctil afecta la virilidad del hombre, provocando que por pena o desinformación se atienda con especialistas este problema.
Es recomendable que la pareja comparta sus inquietudes, deseos y expectativas que tiene del otro para que vuelvan a comunicarse sexualmente.
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