La pareja denunció que la dueña del lugar les dijo que no organizaban bodas gay o interraciales
La polémica se hizo viral en redes luego de que la dueña apareciera en un video diciendo que dicha unión iba en contra de sus “creencias cristianas”
Un salón de eventos sociales en Estados Unidos se negó a ofrecer sus servicios a una pareja interracial para que celebrara su boda, debido a que la dueña de ese inmueble dijo que esa unión iba en contra de sus “creencias cristianas”.
A través de un video, que se hizo viral en redes, la dueña del Boone’s Camp Event Hall de Booneville, en el estado de Mississippi, fue grabada por la hermana del novio diciendo: “No organizamos bodas gay o interraciales”, luego de que les comunicara por correo electrónico su decisión.
NEW: A Mississippi venue allegedly cancelled a couple’s wedding plans after discovering the couple was a black man + a white woman.
“We don’t do gay weddings or mixed race, because of our Christian race—I mean, our Christian belief,” a woman says.
More: https://t.co/9P0ZjNu3M0 pic.twitter.com/XKlRRSL44B— Ashton Pittman (@ashtonpittman) September 1, 2019
“Lo primero de todo, no organizamos bodas gays o interraciales”, dice la dueña del local y al ser cuestionada por sus razones, respondió: “Por nuestra raza cristiana, quiero decir, por nuestras creencias cristianas… Simplemente no participamos en eso. Simplemente elegimos no hacerlo”.
El video en el que aparece la dueña del local se hizo viral en Twitter con más de 2 millones de reproducciones, lo que ocasionó que la municipalidad de Booneville emitiera un comunicado en el que condenó “este tipo de políticas discriminatorias”.
Tras la polémica generada, la página de Facebook del salón de eventos fue cerrada, pero el domingo nuevamente se activó con un mensaje en el que ofrecía disculpas, informó la BBC.
“A todos aquellos ofendidos, heridos o que se sintieran condenados por mi declaración les pido sinceras disculpas por mi ignorancia al no saber la verdad sobre esto...Mi intención nunca era racista, sino mantenerme firme en lo que yo ‘asumí’ que era correcto respecto al matrimonio”, escribió la mujer.
Desde el 2016, en Mississippi se aprobó una ley pionera que protege las “creencias religiosas o convicciones morales sinceras”, lo que significa que las empresas pueden rechazar legalmente prestar sus servicios a parejas del mismo sexo y personas transgénero.
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