Acusan que desde hace 15 años se dedicaba a violar a jóvenes
Este padre se presentó ante las autoridades luego de permanecer prófugo durante cuatro meses y después de que la PGR había ofrecido 200 mil pesos por información sobre su paradero
El sacerdote Juan Manuel Riojas, conocido como el “padre Meño”, quien permanecía prófugo de la justicia después de ser acusado de violar a varios seminaristas menores de edad, se entregó hoy por cuenta propia a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) de Coahuila.
La dependencia ya había colocado anuncios en donde ofrecían 200 mil pesos de recompensa para dar con el paradero del “padre Meño”, sin embargo, él mismo llegó a las instalaciones de la dependencia, acompañado de su abogado, con la intención de que se inicie una investigación por el delito de violación que se le imputa.
El pasado 29 de julio, la PGJE, mediante la PGR, emitió una Alerta Roja para localizar en México o en 190 países del extranjero a dicho sacerdote. Así, no se le pudo saber nada de él durante cuatro meses, luego de ser acusado del delito de violación con calificativa de prejuicio de dos estudiantes del seminario menores de edad.
Esto sujeto había sido acusado gracias a los testimonios de los exseminarista Ignacio Martínez Pacheco y el aún seminarista Roberto Javier Calzada Tamez, quienes dieron fe del acoso y abuso sexual por parte del “padre Meño”, además de hablar de lo complicado que era denunciar penalmente al cura pederasta y al obispo que lo encubría, esto gracias a que cuenta con protección del gobernador del estado, Rubén Moreira.
La periodista Sanjuana Martínez tuvo acceso al expediente judicial del primer caso en México, el cual incluye una denuncia contra el obispo y otras autoridades más, por el delito de conspiración a la pederastia clerical.
Con una orden de aprehensión y un amparo, dicho sacerdote cuenta con el apoyo de la Arquidiócesis y tiene tres abogados, uno de ellos, Santos Vázquez Estrada, exdelegado de la Procuraduría General de Justicia en las regiones Centro y Norte Uno de Coahuila, quien ya interpuso en el Juzgado Tercero de Distrito una solicitud de protección bajo el expediente 256/2017 contra el juez de primera instancia en materia penal del Sistema Acusatorio y Oral del Distrito Judicial de Río Grande.
“El padre Meño está siendo protegido por el gobernador Rubén Moreira”, acusó Ignacio Martínez Pacheco, quien se entrevistó con el mandatario. “Me prometió que lo detendrían y todo fue una mentira. Al contrario, él y las autoridades judiciales, junto al obispo Garza Treviño se han dedicado a esconderlo”, tal como lo publicó el portal de noticias SinEmbargo.
Por si fuera poco, Roberto Javier Calzada Tamez, de 18 años, está seguro de que la protección viene de más arriba, desde la misma institución vaticana, ya que el nuncio apostólico Franco Coppola, le mintió en una carta que le envío.
Vale la pena recordar que el “padre Meño” comenzó a violar niños por lo menos desde hace 15 años. Su “método” era elegir a sus víctimas por las noches, ya que hacían rondines por los dormitorios de los seminaristas de 14 y 16 años, después de esto buscaba encuentros supuestamente casuales, mismos que eran utilizados para atacar sexualmente a los jóvenes.
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