Juan José Sabines Guerrero, ex Gobernador del estado de Chiapas, fue nombrado por el gobierno de Enrique Peña Nieto Cónsul General de México en Orlando, Florida, Estados Unidos, a pesar de haber culminado su gestión entre reclamos por el severo endeudamiento con que dejó al estado aunado a la situación de pobreza y marginación que enfrentan miles de chiapanecos, en su mayoría indígenas.
Sabines acumuló una deuda de más de 40 mil millones de pesos, cifra que en su momento fue cuestionada por legisladores de oposición al considerar que por el volumen de las economías es superior a la mega deuda que dejó en Coahuila el ex Gobernador Humberto Moreira Valdés.
Sin embargo, el ex Gobernador ha revivido y él mismo se encarga de promoverlo en Internet: anuncios pagados por el Consulado lo muestran a él casi como en campaña.
Acompañado de su familia, Sabines Guerrero arribó a Florida el pasado 6 de junio para relevar en el cargo al guerrerense Efrén Leyva Acevedo, pero fue hasta el martes pasado que asumió formalmente el cargo diplomático.
Sabines nunca ha tenido experiencia en la diplomacia y tampoco pertenece al cuerpo de profesionales que conforman el Servicio Exterior Mexicano, pero aún así percibirá 10 mil dólares mensuales de salario, que es lo que le corresponde como Cónsul.
Su polémica designación ha hecho que los diputados de la izquierda en Chiapas reaccionen exigiendo que se le revoque su nombramiento.
Los legisladores chiapanecos consideraron que la decisión de colocar en un cargo de representación diplomático a Sabines es lamentable porque éste es uno de los ex gobernadores más aborrecidos y criticados en Chiapas.
“No es posible que la persona que hizo el mayor saqueo” a Chiapas, ocupe ahora un cargo que debería ser ocupado por alguien que nos represente dignamente y no por alguien que se enriqueció y sirvió… del erario”, acusó la Diputada perredista Alejandra Soriano Ruiz.
La perredista exigió en entrevista con un diario local que no se quedé impune “el desfalco por más de 40 mil millones de pesos” que, presuntamente, Sabines cometió al Gobierno chiapaneco y que “sumergió en la crisis más grande de la historia” al estado.
Soriano Ruiz señaló que en vez de recibir un nombramiento, Sabines debería ser arrestado por los daños financieros “en el que dejó hundido al estado”, en medio de “una historia de corrupción, quizá la más grande de la que tengan memoria los chiapanecos”.
Al concluir su mandato, Sabines fue demandado penalmente por el abogado y activista Horacio Culebro Borrayas, quien lo acusó del presunto “desfalco de 40 mil millones de pesos” en perjuicio de la Hacienda estatal.
Junto con el ex mandatario fueron acusados 50 de sus ex colaboradores ante la Fiscalía Especial de Servidores Públicos de la Procuraduría General de la República (PGR).
Culebro Borrayas integró el recurso legal con una comisión de, al menos, veinte presuntos delitos, entre ellos, los de asociación delictuosa, delincuencia organizada, enriquecimiento ilícito, delitos cometidos por servidores públicos, tortura e incomunicación.
En 2011, Culebro Borrayas salió de prisión luego de estar ahí un año y cinco meses por delitos “prefabricados”, luego de que echara abajo la ley del ex Gobernador Sabines del 2009 que pretendía reelegir a 118 alcaldes y diputados locales en el 2010. Desde que fue liberado, aseguró, la orden fue “que se quedara quieto y no siguiera con sus juicios en contra de los intereses del gobierno”.
En ese entonces declaró que los únicos que podrían atentar contra su vida eran Juan José Sabines Guerrero, Nemesio Ponce Sánchez, Manuel Velasco Coello, Rosario Pariente, Raciel López Salazar, y Seth Yassir Vázquez Hernández. Todos ellos, funcionarios públicos.
Por su parte, Walter León Montoya, presidente de la Organización de Transportistas y Empresarios Chiapanecos (OTRAECH), y que durante la administración de Sabines Guerrero fuera encarcelado, aseguró que este nombramiento es una ofensa para los chiapanecos, porque no se le debería permitir a un “delincuente” de esta calaña, obtener un premio de este tamaño.
“Dios quiera que esto sólo sea una equivocación, Juan Sabines es un delincuente que no debe tener un puesto de ningún tipo, sino debe ser juzgado y recluido en El Amate”, expresó en una entrevista que le realizó el Diario de Chiapas.
Agregó que lamentablemente el ahora ex gobernador de Chiapas, se ha mantenido en la impunidad, igual que cuando era gobernante, por lo que no permitirá este nombramiento.
“Si esto se da, muchos chiapanecos vamos a manifestarnos incluso a nivel internacional”, amagó el transportista.
León Montoya promovió una controversia contra Sabines Guerrero, ya que éste pretendía alargar su periodo de gobierno durante 1 año y 8 meses más, lo cual era anticonstitucional.
“Le gané la controversia, pero lo que más le molestó es que di una conferencia de prensa, para dar a conocer dicho hecho”, dijo. “A los pocos días la Procuraduría de Chiapas me inventó varios delitos y me metió a la cárcel un año y seis meses, delitos como el enriquecimiento ilícito, y asesinato intelectual”, aseguró el transportista.
Sabines dejó a su estado sumido en una deuda que, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), alcanzaba en ese entonces los 16 mil 513.1 millones de pesos –cifra que colocaba a Chiapas entre los cinco estados de la República más endeudados–, aunque según la columna Templo Mayor del diario Reforma, publicada el 14 de agosto de ese mismo año, la deuda ya rebasaba los 40 mil millones de pesos si se sumaba la deuda registrada, no registrada y a proveedores.
En septiembre de ese mismo año, a escasos meses de dejar el poder estatal, el Gobernador solicitó al Congreso del Estado autorización para contratar un crédito de 5 mil millones de pesos para la transición del próximo gobierno.
Hasta diciembre de 2012, cerca de 69, de los 122 municipios que conforman el estado, se declararon en quiebra y sin dinero. No tenían lo suficiente para pagar sueldos y aguinaldos a empleados y liquidar deudas con proveedores. A esto se sumaba los adeudos millonarios que el estado debe a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
De acuerdo con recientes estudios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Chiapas es uno de los estados con menor desarrollo social; incluso tiene 28 de los municipios más pobres de todo el país.
A pesar de estos fatídicos números, Juan Sabines gastó durante su administración al menos mil 104 millones de pesos únicamente en los rubros de publicidad gubernamental y comunicación social, de acuerdo con una nota del diario Reforma, publicada en mayo del 2013.
Con información de Sin Embargo
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