La decisión se tomará el 5 de abril
Esto supondría la ilegalización del grupo religioso. Rusia ya ha prohibido algunas de sus publicaciones por “incitar al odio y destruir familias”
El Tribunal Supremo de Rusia estudiará si cataloga a los Testigos de Jehová como una organización “extremista”, luego de que el Ministerio de Justicia pidió un permiso para cerrar las oficinas más importantes de dicha agrupación religiosa, localizadas en la ciudad de San Petersburgo.
La página web de la máxima instancia judicial, afirma que el supremo tendrá una reunión el próximo 5 de abril para analizar esa solicitud, que de concretarse supondría la ilegalización de un grupo que asegura tener ocho millones de seguidores en todo el mundo.
Los Testigos de Jehová publicaron un comunicado en el que aseveraron que “millones de creyentes de todo el mundo consideran las acciones del Ministerio un gran error” e hicieron énfasis en que no son una organización extremista. Así mismo, señalaron que si esto se hace realidad, el veto afectaría a 400 de sus ramificaciones y a un total de 175.000 fieles. “Si esta denuncia prospera, acarreará consecuencias catastróficas para la libertad religiosa en Rusia”, aseguró la congregación religiosa.
Cabe destacar que en lo que va del año, las autoridades ya realizaron un registro a gran escala en la sede de San Petersburgo en donde se decomisó documentación. Rusia ya ha prohibido publicaciones de la organización abajo el argumento de que destruye familias e incita al odio y, según la Amnistía Internacional, 16 miembros ya fueron condenados a finales de 2015 por pertenencia a una “organización extremista”.
Fuente: Europa Press
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