Para la directora del Laboratorio de Neuropsicología de la UNAM, Trump es un psicópata, aunque existoso
De acuerdo con la manera en la que hace negocios, se puede conocer que es una persona muy agresiva y que toma altos riesgos
Donald Trump fue calificado como una persona extrovertida que “toma altos riesgos por lo que genera grandes ganancias, pero también enormes pérdidas”.
El análisis psicológico del presidente de Estados Unidos fue hecho por la directora del Laboratorio de Neuropsicología de la Universiadad Nacional Autónoma de México, Feggy Ostrosky.
En entrevista para Aristegui CNN, la experta aseguró que “Trump tiene ciertas características que es el extremo de la parte extroversión, y la parte de lo desagradable que es. Tiene lo más alto en extroversión. Y lo más bajo en agradabilidad… Es motivado, incansable, incapaz de estar quieto, duerme poco, muchos de los grandes líderes son así, pero él todo el tiempo está moviéndose”.
La especialista comentó que por su manera de hacer negocios, se puede conocer que es una persona muy agresiva y que toma altos riesgos, mismos que replicará durante su mandato frente al gobierno de Estados Unidos.
“Es un psicópata… es un trastorno de personalidad. Es un psicópata exitoso. La psicopatía es un trastorno de personalidad que se va a manifestar en tres esferas: en la esfera intrapersonal, son individuos superficialmente encantadores con un enorme sentido de autovalía. En la esfera emocional, son personas que muchas veces no sienten sentimientos de culpa, y entonces no tienen ningún problema en matar, en dejar a las personas sin hogar, en hacer negocios”, informó.
Ostrosky dijo que por “la psicopatía no todos están en la cárcel. Afuera está entre los hombres de negocios, muchos exitosos, entre muchos líderes políticos”, sumado a que en “la parte interpersonal son gente manipuladora, que utiliza a los demás para sus propios fines”.
El presidente de Estados Unidos también fue descrito como “maquiavélico”, ya que “el objetivo es el fin, el medio cómo lo logras”, lo cual dijo que no importaba, ya que su forma de negociar es durísima.
“Él no acepta perder. Para él hay ganadores y perdedores, y si pierde se enoja horrible, lo hemos visto en su campaña, como insulta a las mujeres y a los reporteros en general”, por lo que señaló que Trump “quiere tener una dominación social de la situación: él ser el centro”.
Cuestionada sobre la simpatía que puede generar el mandatario, dijo que “es muy grosero, muy agresivo en sus comentarios, en su actitud, y entonces esta agresión y esta ambición social transmite esta dominancia y esta cuestión de que es desagradable en su interacción”, señalando, incliso, que tamibién tiene rasgos narcisistas.
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