Ackerman presumía que la captura de Cienfuegos era un logro de la 4T
La Fiscalía General de la República (FGR) anunció la noche de ayer que tras llevarse a cabo diversas investigaciones no encontró pruebas por los delitos contra la salud ni lavado de dinero contra el general Salvador Cienfuegos Zepeda, exsecretario de la Defensa Nacional, por lo que determinó no ejercer acción penal.
“Del análisis correspondiente, se llegó a la conclusión de que el General Salvador Cienfuegos Zepeda nunca tuvo encuentro alguno con los integrantes de la organización delictiva investigada por las autoridades norteamericanas y tampoco sostuvo comunicación alguna con ellos, ni realizó actos tendientes a proteger o ayudar a dichos individuos”, se lee en un comunicado.
Internautas reaccionaron de inmediato a esta noticia y varios de ellos recordaron cuando el académico John Ackerman publicó, el 16 octubre del año pasado, un mensaje para presumir que la aprehensión de Cienfuegos era un logró del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
“Era un logro de la Cuarta Transformación (4T) lo que no hubiera sido posible con otro presidente”, decía el mensaje.
En dicho tuit el investigador de la UNAM señaló que el presidente López Obrador habría sido informado sobre la orden de aprehensión 15 días antes, sin embargo, permitió que “la justicia siguiera su curso”. Además aseguró que los excandidatos a la presidencia de México, Ricardo Anaya Cortés y José Antonio Meade, “hubieran salido corriendo a aviar y esconder a su cómplice”.
No obstante, Salvador Cienfuegos fue exonerado por la FGR, lo que contradice a lo que decía Ackerman hace apenas unos meses.
Investigación General Salvador Cienfuegos
La FGR señaló que se llevó a cabo un análisis de la situación patrimonial y del cumplimiento de obligaciones fiscales de Cienfuegos y “no apareció dato alguno o síntoma de obtención de ingresos ilegales o acrecentamiento de su patrimonio fuera de lo normal, de acuerdo con sus percepciones en el servicio público”.
Igualmente recordó que desde 2013, la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), inició sin el conocimiento y sin la colaboración de la administración mexicana en curso, una investigación de delitos contra la salud, en donde se inmiscuía al entonces Secretario de la Defensa Nacional, el General de División Salvador Cienfuegos Zepeda.
De igual manera, durante la presente administración, la DEA continuó las pesquisas sin informar a las autoridades mexicanas sobre el caso. La FGR afirmó que realizó todas las acciones necesarias para obtener las evidencias indispensables en el caso, pero no encontró nada irregular.
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