Durante el funeral del líder Qassem Soleimani, un ciudadano propuso recaudar un dólar por cada iraní y con ello pagar la recompensa
Tras el ataque estadounidense, el gobierno de Teherán promete una “dura venganza”
Durante el funeral del general Qassem Soleimani, celebrado en Mashad, Irán, un hombre propuso recolectar un dólar por cada ciudadano iraní para juntar un total de 80 millones de dólares, que serían utilizados como recompensa por la cabeza del presidente estadounidense Donald Trump.
“Irán tiene una población de 80 millones de habitantes. Con base en la población del país, queremos obtener 80 millones de dólares, lo que será recompensa para aquellos que se acerquen a la cabeza del presidente Trump”, propuso el hombre en un video difundido en redes sociales durante el funeral.
El viernes pasado, EU ordenó el ataque al convoy en el que viajaba Soleimani, líder de la Fuerza Quds, un grupo de élite de la Guardia Revolucionaria de Irán.
A modo de justificar el ataque, Trump declaró que Soleimani mató a miles de miembros de personal militar estadounidense y que planeaba otros ataques, informó El Universal.
Tras la muerte del líder iraní, el gobierno de Teherán prometió una “dura venganza” y durante el multitudinario funeral se escuchó varias veces “¡Muerte a Estados Unidos!”.
Por su parte, el diputado iraní Abolfazi Abutorabi declaró que el país está en condiciones de lanzar un ataque en contra de EU, solo que buscarán el momento apropiado.
“Podemos atacar la mismísima Casa Blanca, podemos responderles en suelo estadounidense. Tenemos el poder y responderemos en el momento apropiado”.
Ante las declaraciones del gobierno iraní, Trump se limitó a responder a través de su cuenta de Twitter lo siguiente: “Si Irán ataca a cualquier persona o blanco estadounidense, Estados Unidos responderá rápida y totalmente, quizá en una forma desproporcionada”.
Además aludió a las críticas que recibió de los demócratas por no haber notificado al Congreso de la decisión de matar al general Soleimani.
En alusión a los “52 blancos” declarados por el presidente estadounidense para atacar Irán, Mohsen Rezai, excomandante de los Guardianes de la Revolución, declaró que su país atacará a Haifa y a los centros israelíes para extinguir por completo a Israel.
Asimismo confesó que Irán ya no cumplirá con las restricciones del pacto nuclear de 2015 en cuanto al enriquecimiento de uranio, un elemento indispensable para fabricar armas nucleares, aunque aclaró que cooperará con la agencia de supervisión atómica de Naciones Unidas.
Mientras la tensión continúa, ayer por la noche se registraron al menos seis impactos de cohetes, dos cerca de la embajada de Estados Unidos en Bagdad, poco después de que el Parlamento iraquí votara para pedir la expulsión de las tropas estadounidenses del país.
En el ataque resultaron heridas seis personas y dos de los proyectiles aterrizaron cerca de la embajada estadunidense que se localiza dentro del perímetro de la Zona Verde.
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