El síndrome de Down es un trastorno genético.
Aunque falta mucho por analizar y no se trata de una cura, abre la puerta a nuevas posibilidades.
Durante años la medicina ha indicado que el síndrome de Down no tiene tratamiento, pero esto empieza a derrumbarse.
Investigadores españoles acaban de demostrar que un compuesto presente en el té verde, acompañado de un protocolo de estimulación cognitiva, es capaz de mejorar las capacidades intelectuales de personas que lo padecen.
“Es la primera vez que un tratamiento demuestra eficacia en un ensayo fiable en términos científicos”, afirmó Mara Dierssen, neurocientífica del Centro de Regulación Genómica de Barcelona y colíder del estudio.
Si bien no es la cura, abre una puerta para tratarlo y comenzar a estudiarlo.
El síndrome es un trastorno genético en el cual una persona tiene 47 cromosomas, en lugar de los 46 habituales. Esa copia extra altera la formación del cuerpo y el cerebro.
El equipo de Dierssen, con trabajos en ratones, identificó el gen DYRK1A, relacionado con la formación del cerebro y sobreactivado por el cromosoma extra. El gen producía un exceso de proteínas, pero el compuesto del té verde devuelve las proteínas a los niveles normales.
Fuente: El País
Sé parte de la conversación