Los tacos le ayudaron a bajarse una borrachera.
El joven dijo estar deprimido y en dos ocasiones trató de saltar de un puente.
Policías de la Ciudad de México evitaron la madrugada de este martes que un joven se arrojara de un puente en el cruce de Ticomán e Insurgentes.
Cuando el muchacho intentó de nuevo terminar con su vida, los uniformados hablaron con él y lo invitaron a cenar tacos, evitando que se lanzara al vacío.
El sujeto dijo estar deprimido, ser originario de Guerrero y no conocer a nadie; además, estaba en completo estado de ebriedad.
Para poder ayudarlo, los oficiales le compraron una orden de tacos surtidos para que se le bajara la borrachera y pudiera pensar con claridad.
Posteriormente, lo llevaron a recibir atención psicológica.
Fuente: Azteca Noticias
Sé parte de la conversación