Los gallos o las gallinas forman parte de muchas “visiones” que tengo, a veces compulsivas. Es inexplicable, pero el gallo y la gallina son para mi seres de pesadilla. (Luis Buñuel)
Luego de concluido el proceso electoral del pasado 7 de Julio, el gallinero político del país se alboroto e iniciaron los destapes prematuros de cara a las elecciones presidenciales del 2018. Con espolones o sin ellos, los galleros ordenaron cerrar puertas y aventaron al palenque sucesorio a sus respectivos gallos.
El primero en enseñar su ejemplar fue el ex presidente Felipe Calderón, si el mismo que presidio el sexenio que dejo a más de 100 mil familias enlutadas, miles de viudas y huérfanos, así como al país bañado en sangre, pues bien, ese personaje impresentable ahora pretende que su esposa Margarita Zavala sea candidata del PAN y a través de ella, de ser posible, volver a hacer de México lo que fue durante su terrorífico sexenio.
Otro que no lo ha dicho directamente pero trabaja desde hace mucho para llegar a ser abanderado presidencial del partido azul y blanco es el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, de quien algunas voces al interior del panismo aseguran que es un gran cuadro y que en cuanto pueda hacerlo, se lanzara al palenque en busca de Los Pinos.
Tanto fue el alboroto que hasta el Warhorses del gallinero denominado GABINETE desoyó al gallero encargado del interior y en los últimos días anda entre dejando ver que ya se está colocando las navajas para entrarle a la encarnizada pelea del palenque sucesorio, si me refiero a Luis Videgaray Caso, el mismo titular de la Secretaria de Hacienda que hace dar tumbos a las finanzas del pais y golpea el bolsillo y mesa de todos los mexicanos, claro menos a los de él y sus compinches.
Hay quienes dicen que el Warhorses (Videgaray) es el alter ego del gallero copetón dueño del corral y que ya tiene el visto bueno para arrancar rumbo al palenque sucesorio, que nadie se sorprenda, pues el Warhorses del copetón ha sabido hacer muy bien las cosas no en finanzas ni economía, pero si en la administración eficiente de la expectativa, si, solo eso, la expectativa de toda una nación.
Francisco Vásquez Padilla
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