Un grupo de miembros de la congregación cristiana Casa de Dios Eben-Ezer se encerró en un templo luego de que su pastor les dijo que caería un meteorito que generaría una ola gigante y acabaría con la vida en el planeta.
Los hechos se registraron en la comunidad de Dzidzantún, Yucatán, donde el doctor Luis Leopoldo Magaña Aguilar, director del centro de salud de la comunidad de Yobaín, “profetizó” el cataclismo.
Entre 40 y 50 mujeres y niños se encerraron el pasado 30 de diciembre con el pastor, quien les dijo que un día después un meteorito caería en el puerto de Santa Clara y se acabaría el mundo, reportó el Diario de Yucatán.
Sin embargo, los esposos de las mujeres comenzaron a buscarlas y al acudir a la iglesia, ubicada en la calle 19, la encontraron cerrada con tablas, por lo que pidieron ayuda a la Policía Municipal y rescataron a sus familias.
Magaña Aguilar aseguró que Dios le reveló que el último día de 2014 un meteorito caería en la costa de Santa Clara, levantando una ola de gran tamaño que cubriría gran parte de Dzidzantún y pueblos costeros cercanos.
Por lo tanto le pidió a los profesionistas que forman parte de la congregación, entre ellos maestros, doctores y enfermeras, que retiraran todo su dinero de los bancos para comprar víveres. El pastor también pidió a sus fieles que quemaran sus vestimentas, porque en el nuevo camino de sobrevivencia la ropa no sería necesaria, dio a conocer el portal Primer Plano.
Posteriormente Magaña Aguilar y sus seguidores se encerraron en la Casa de Dios Eben-Ezer, donde se colocaron grandes tablas e incluso se tapiaron algunas partes con cemento para que no entrara el agua de la “gran ola”.
Aproximadamente a la una de la madrugada del miércoles pasado los feligreses ingresaron a la iglesia, incluyendo menores de edad, pues según la “profecía” el meteorito caería a las 3 de la madrugada.
No obstante, todo terminó cuando algunos padres de familia pidieron la intervención de la Policía.
Ayer la iglesia presbiteriana Emmanuel se deslindó del caso y aseguró que el grupo denominado Casa de Dios Iglesia Cristiana Eben-Ezer se independizó, de acuerdo con información del Diario de Yucatán.
Aguilar Magaña, líder de la casa Eben Ezer, es médico y empleado de la Secretaría de Salud de Yucatán.
Habitantes de la comunidad de Yobaín que acuden al Centro de Salud, afirmaron ayer que Aguilar Magaña les decía que con oraciones quedarían bien o con hierbas y los invitaba a asistir a la congregación Eben-Ezer.
Una de las religiosas dijo que el fin del mundo no ocurrió porque “Dios tuvo piedad de nosotros, gracias a la oración”.
Vecinos del templo pidieron a las autoridades que actúen pronto antes de que suceda una tragedia en el lugar.
Tomada de Proceso
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