Los Papeles de Panamá, en los que están implicados alrededor de 72 mandatarios de todo el mundo, provocaron la caída del primer ministro de Islandia y ahora, tienen en riesgo la estabilidad del presidente argentino Mauricio Macri.
El fiscal Federico Delgado acusó penalmente a Macri por la presunta omisión de su participación en dos empresas que radican en paraísos fiscales, según revelaciones de la investigación global.
Poco tiempo después de que iniciara su cargo como presidente de Argentina, Macri será investigado para determinar si debía incluir o no dichas empresas en las declaraciones juradas de bienes, mismas que presentó durante su gestión como jefe de Gobierno de Buenos Aires. El nombre de Mauricio Macri aparece continuamente en los Papeles de Panama, como director de las sociedades Fleg Trading Ltd y Kagemusha, propiedad de su padre Franco Macri.
El titular de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA), Sergio Rodríguez pidió que la AFIP, la IGJ y la OA presenten documentación sobre el Presidente argentino y las sociedades off shore mencionadas en la investigación. El titular de la PIA recomendó que se pidan informes a la Administración Federal de Ingresos Públicos, a la Inspección General de Justicia (IGJ) y a la Oficina Anticorrupción (OA) sobre el funcionamiento de las sociedades off shore y las declaraciones juradas de Macri.
La primera víctima de importancia de los papeles de Panamá fue el primer ministro de Islandia, Sigmundur Gunnlaugsson, quien dejó su cargo este martes tras conocerse su vinculación con el escándalo desvelado tras la filtración de 11 millones de documentos de la empresa panameña Mossack Fonseca que muestran cómo los ricos y poderosos usan los paraísos fiscales para ocultar su riqueza. La investigación mostró que Sigmundur Gunnlaugsson no declaró su participación en una sociedad offshore que tenía junto a su esposa y fue acusado de esconder millones de dólares de inversiones en los bancos de su país. Tras conocerse la filtración, el lunes tuvo lugar una manifestación en la capital del país, Reykjavík, para pedir su renuncia.
En México, Juan Armando Hinojosa Cantú, empresario dueño de grupo Higa y asociado del presidente Enrique Peña Nieto fue también implicado en los papeles de Panamá. El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación expuso un perfil del empresario tamaulipeco, denominado en el texto “contratista favorito del Presidente de México”, en el que se señala que sus operaciones con el despacho Mossack Fonseca comenzaron a mediados del año pasado con el fin de resguardar 100 millones de dólares. Hinojosa tenía una red compleja, con nueve entidades constituidas en tres jurisdicciones diferentes: Nueva Zelanda, Reino Unido y Países Bajos. El titular del Sistema de Administración Tributaria (SAT), Aristóteles Nuñez, informó que este lunes se empezará a revisar la información de él y los otros mexicanos implicados en el caso.
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