La pequeña está a salvo con sus padres en Turquía
Abdullah trataba de tranquilizar a su hija Salwa cuando detonaban los aparatos explosivos
Luego de que hace unas semanas se viralizara el caso de un padre que enseñaba a su hija a reírse de las bombas que se escuchaban cerca de su casa, en Siria, se dio a conocer que la familia logró mudarse a Turquía.
En las imágenes, difundidas en redes sociales el pasado 17 de febrero, se puede observar como Abdullah trataba de tranquilizar a su hija Salwa, cuando detonaban los aparatos explosivos.
Sin embrago, recientemente, Mehmet Algan, un amigo de la familia, confirmó que la pequeña está a salvo con sus padres en Turquía.
“Están a salvo ahora. Salwa crecerá sin escuchar bombas”, escribió en una publicación en su cuenta de Twitter, y hablo de la situación en Siria antes de los constantes bombardeos.
“Siempre y cuando no hubiese bombardeos, los niños iban a clase con normalidad. Pero desde que el régimen comenzó una ofensiva a gran escala para recuperar el último bastión rebelde de Siria a mediados de diciembre, la vida es un infierno”, declaró Algan en una entrevista referida por El Universal.
İdlipli bir arkadaş ailesiyle birlikte sınır kasabası Sarmada’ya sığınmış. 4 yaşındaki kızına uçak ve bomba seslerinin bir oyun olduğunu öğretmiş. Her ses geldiğinde ailecek gülüyorlar oyun bozulmasın diye. Suriye insanlığın ağır çekim mağlubiyeti oldu. Çok büyük kalp ağrısı.
— Mehmet Algan (@alganmehmett) February 16, 2020
“Mi mensaje al mundo es que mi hija y todos los niños de Siria vivan en paz. Una vida lejos de los bombardeos y la muerte. Una vida a través de la cual mi hija puede estudiar y aprender”, agregó.
Según cifras de Unicef, unos seis mil 500 niños al día son forzados a huir por “la crisis en el noroeste de Siria se está convirtiendo en una crisis de protección infantil cuya dimensión no tiene precedentes”, indicó la directora ejecutiva, Henrietta Fore.
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