No han descartado que en la finca donde se encontraron los tinacos no se hayan disuelto los cuerpos de las víctimas
El resto de los indicios, alrededor de 150 datos de prueba que incluyen material genético y huellas, se continúan analizando
El Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) aseguró que, hasta el momento, no hay indicios o pruebas científicas que confirmen la muerte y disolución de los cuerpos de los tres estudiantes de cine desaparecidos en Tonalá, Jalisco.
Luis Octavio Cotero Bernal, director del IJCF, explicó que no han descartado que en la finca donde se encontraron los tinacos no se hayan disuelto los cuerpos de las víctimas, como medios locales aseguraron. Sin embargo, no han encontrado elementos que confirmen dicha hipótesis.
“Hasta este momento no hemos encontrado ningún indicio que corresponda al perfil genético de Javier Aceves Gastélum, pero la policía científica federal, que también colabora en la investigación está realizando otras pruebas adicionales”, explicó el funcionario en una conferencia de prensa, citada por Animal Político, en la cual no se aceptaron preguntas de medios de comunicación.
http://www.mientrastantoenmexico.mx/es-una-mentira-satanica-la-version-del-gobierno-del-asesinato-de-los-estudiantes-de-cine-familiares/
Fueron Omar “N”, un rapero conocido como QBA e integrante del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), y Gerardo “N”, El Cochi, presunto líder de una célula delictiva de esta organización, quienes se adjudicaron participación en el crimen y detallaron cómo detuvieron y asesinaron a los jóvenes estudiantes, a quienes presuntamente disolvieron en ácido.
“Debido a lo corrosivo de esta sustancia, la molécula de ADN se rompe y en estas condiciones es imposible obtener algún perfil genético. El ácido sulfúrico encontrado en la casa tres era (de) una concentración del 98%, que es el grado más alto en el que se comercializa, el cual fue combinado con agua, lo que potencializa la corrosividad y el grado de destrucción de organismos. Son estas circunstancias las que hacen que la labor de los especialistas lleve aún más tiempo para el estudio de las pruebas”, explicó Cotero Bernal.
Puntualizó que los elementos que tienen de prueba en el caso no son de los tinacos contenedores de ácido, sino las manchas de sangre localizadas en la casas de la calle Lechuga y la finca de la calle Amapola, la primera corresponde a Daniel y la segunda a Marco, mientras que de Javier aún no hay información.
Cotero Bernal enfatizó que el resto de los indicios, alrededor de 150 datos de prueba que incluyen material genético y huellas, se continúan analizando en conjunto con la Policía Federal, por lo que exhortó a “no caer en precipitaciones”, ni generar “confusiones apresuradas”.
Sé parte de la conversación