El pequeño quería venderlo
Aunque lo llevaron al hospital, no pudieron ayudarlo
Un niño de cuatro años murió este fin de semana en Matamoros, Tamaulipas, cuando tropezó y cayó sobre un envase de cerveza, una “caguama”, que llevaba en las manos.
El menor, identificado como Derek, se dirigía a la tienda con sus primos para vender el envase por $1.50 y con ello comprar algunos dulces.
Cuando el pequeño tropezó, cayó sobre el recipiente de vidrio, mismo que se rompió y los cristales se le incrustaron en el estómago y abdomen.
Al ver la gravedad de las heridas, sus primos corrieron para pedir ayuda al padre del niño, quien lo llevó al Hospital General Alfredo Pumarejo.
Lamentablemente los cristales dañaron órganos internos del pequeño, por lo que falleció después.
Con información de Publimetro
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