Sus dueños murieron desangrados después de que los atacó
250 mil personas firmaron una petición en Change. org para que las autoridades no ejecuten al animal
La semana pasada un perro mató a sus dueños cerca de la ciudad alemana de Hanover.
Tras lo ocurrido, las autoridades alemanas aceptaron haber cometido un error en la evaluación del can y por lo tanto no será sacrificado.
“Chico”, el perro de la raza American Staffordshire Terrier fue capturado por un grupo de bomberos, el pasado martes, al interior de la casa de sus dueños junto al cuerpo sin vida de ellos.
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Las autopsias confirmaron que tanto Lezime K, de 52 años, como su hijo Liridon, de 27, murieron desangrados luego ser atacados por su mascota.
Todo parecía indicar que el perro sería sacrificado, pero gracias a la petición “Let Chico Live (Dejen vivo a Chico)” lanzada en la plataforma Change.org en la que 250 mil personas firmaron, las autoridades suspendieron su ejecución.
Las autoridades alemanas reconocieron su error y aseguraron que debieron alejar al perro de sus dueños al enterarse de que el animal había sido entrenado para luchar.
De acuerdo con la agencia RT, un portavoz municipal anunció que se analiza la posibilidad de trasladar a “Chico” a una instalación segura para perros con dificultades de comportamiento, la cual garantice que el can ya no será un “peligro” para la sociedad.
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