Lexi y Scarleth fueron asfixiadas por su madre bajo el argumento de que era difícil cuidar de ellas
Porton quien aseguró era trabajadora sexual, a través de Facebook vendió la ropa de sus hijas por 600 pesos
Una mujer de 23 años fue sentenciada a cadena perpetua por matar a sus dos hijas a principios de 2018 en Reino Unido, compartió el sitio SDP Noticias.
Tras varias investigaciones por parte de las autoridades, se determinó que Louise Porton asfixió a Lexi de 3 años y Scarleth de 17 meses. El 15 de enero de 2018 asesinó a su hija mayor y el 1 de febrero a la más pequeña.
Cuando asfixió a su hija de tres años llamó a los servicios de emergencia para pedir ayuda pues Lexi “no estaba respirando”, los paramédicos al trata de auxiliar a le menor notaron que “llevaba un rato muerta”, por lo tanto el jurado determinó que Louise no realizó la llamada hasta que su víctima no pudiera recibir ayuda.
Durante la madrugada del 1 de febrero, Porton llevó a Scarleth al hospital argumentando que había dejado de respirar sin razón aparente, misma situación que hizo una noche antes de asesinar a Lexi. Sin embargo la policía descubrió que mientras su hija agonizaba al interior del vehículo, su madre se detuvo a cargar gasolina y hacer compras en la tienda.
Tras un año de negar los hechos, la mujer de 23 años confesó que “cuidar a las niñas no era fácil” pues “interferían con su vida sexual”, una de sus fuentes de ingresos ya que era trabajadora sexual.
Una noche antes de que Lexi fuera asesinada, Porton estaba concertando citas sexuales a cambio de dinero, de hecho envió selfies sin ropa a uno de sus clientes las cuales fueron tomadas en el baño de un hospital.
De acuerdo con información proporcionada por medios locales, la mujer de 23 años no mostró arrepentimiento por sus actos. Cuando los investigadores revisaron el móvil de Porton encontraron búsquedas registradas de: “¿Cuánto tarda un cuerpo en enfriarse después de la muerte?, ¿Por qué mi hija de tres años dejó de respirar”, “¿Es posible morir si alguien te tapa la nariz mientras tienes una cinta adhesiva en la boca?”.
Asimismo las investigaciones revelaron que un par de meses después de los asesinatos, Louis Porton vendió vía Facebook la ropa de sus hijas por 30 libras, equivalentes de 600 pesos.
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