La ley castiga este delito con hasta 17 años de cárcel
“Por necesidad económica pongo a la venta uno de mis riñones”, así buscan vender órganos
Pese a que sitios como Mercado Libre y los grupos de Facebook se rigen por políticas de restricción sobre la venta de huesos, esqueletos, sangre, esperma, miembros o residuos humanos, en ambas plataformas hay personas que ofrecen sus órganos.
El Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra) cuenta con un registro de 13 mil 560 personas que en nuestro país se encuentran en la lista de espera para recibir un riñón. Gracias a esta demanda, dicho órgano es susceptible a ser cotizado en el mercado negro, en donde se oferta mediante sitios de compra y venta en Internet.
“Vendo riñón Rh O negativo”, se lee en una oferta en Mercado Libre, por el cual pide 500 mil dólares. Su descripción dice: “Por necesidad económica pongo a la venta uno de mis riñones, soy hombre de 23 años, alimentación saludable, IMC de 20 kg/m2, no fumo, no tomo bebidas alcohólicas, ni consumo ni he consumido ningún tipo de drogas. Sólo gente interesada puede dejar una consulta o pregunta y nos ponemos en contacto. Sólo gente seria”.
Incluso en la sección de comentarios hay interesados que dejan preguntas al “vendedor” para tratar de acordar un precio menor a lo que exige.
Otro de los espacios en donde se ofertan partes del cuerpo humano es en los grupos de Facebook, los cuales han empezado a ganar terreno, pese a que también tienen políticas de prohibición de este tipo de venta.
Ahí se encuentran anuncios como “Vendo O+ completamente sano”, “Por necesidad económica vendo riñón y parte de mi hígado, interesados contactar…”, según una nota publicada por El Botiquín, de El Universal.
Pese a esto, cabe aclarar que el artículo 327 de la Ley General de Salud en México señala que está prohibido el comercio de órganos, tejidos y células. Esto se sanciona con seis y hasta 17 años de cárcel, además de una multa de entre 560 mil pesos y un millón 200 mil pesos ya sea por la compra o venta de un órgano.
Por su parte, la ley General de Salud en México dice que los trasplantes de órganos, tejidos y células en seres humanos vivos se podrán llevar a cabo sólo cuando hayan sido satisfactorios los resultados de las investigaciones realizadas al efecto, representen un riesgo aceptable para la salud y la vida del donante y del receptor, y siempre que existan justificantes de orden terapéutico.
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