Hipólito Mora, ex líder de autodefensas de la tenencia Felipe Carrillo Puerto, conocida como La Ruana, así como 25 hombres y una mujer fueron trasladados en helicóptero por agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), a comparecer ante un juez del penal de Mil Cumbres, para declarar en relación con el enfrentamiento del 16 de diciembre pasado entre su grupo y el de Luis Antonio Torres, El Americano, con saldo de 11 muertos.
El Americano dijo en días recientes que estaba dispuesto a entregarse, pero ya no se le ha visto por la región. Sus seguidores liberaron esta madrugada las carreteras en tres puntos y advirtieron que no se entregarán a la justicia, porque “son inocentes y fueron despedidos el 15 de diciembre de manera injustificada”.
Cuatro compañeros de Mora no se entregaron, tres por miedo y uno porque tiene una lesión en una pierna. Norma Alicia Torres Mora, sobrina del líder de ex autodefensas, se despidió de su familia y dijo que confía en que pronto saldrá libre. Varias de las 27 personas que se entregaron eran integrantes de la recién creada fuerza rural.
Al mediodía, en conferencia de prensa, Mora reiteró su decisión de presentarse ante la justicia. Señaló, entonces, que confiaba en su inocencia y la de sus compañeros, porque lo único que hicieron fue responder a las agresiones del grupo de El Americano, quienes comenzaron el ataque en que murió su hijo Manuel y otros 10.
Un grupo de vecinos fue a despedirlo a su domicilio. “Más vale luchar y dar la cara y no andarme escondiendo en el chingado monte huyendo de la ley”, dijo antes de despedirse de su esposa.
Después de rezar el noveno rosario en memoria de su hijo, un funcionario de la subprocuraduría regional de Apatzingán le dijo que era momento de partir.
Junto con sus 26 compañeros fue trasladado al penal conocido como Mil Cumbres, ubicado a 12 kilómetros de Morelia.
En su cuenta Facebook, Mora escribió: “Me llegan muchos mensajes que quieren apoyar haciendo marchas y movilizaciones porque hoy nos entregamos mis muchachos y yo. Muchas gracias, hagan lo que tengan que hacer”.
En tanto, decenas de personas que apoyan a El Americano bloquearon dos accesos a la tenencia La Ruana para exigir el retiro de las fuerzas federales y cancelar órdenes de aprehensión contra unos 25 de sus compañeros.
Hipólito Mora ingresó al penal de Mil Cumbres por primer vez el 11 de marzo pasado, acusado del homicidio de Rafael Sánchez Moreno y José Luis Torres Castañeda, señalados como ex integrantes de Los caballeros templarios y cercano a Luis Antonio Torres, El Americano. A partir de entonces creció la rivalidad entre ambos dirigentes, aun cuando Mora obtuvo la libertad por falta de pruebas, el 16 de mayo pasado.
Después del surgimiento de los grupos de autodefensa, en febrero de 2013, El Americano intentó integrarse entre la gente de Mora, pero fue rechazado porque tenía fama de haber pertenecido al grupo delictivo Los Viagras, que realizaba labores para los templarios.
El día del funeral de su hijo Manuel, Hipólito Mora dijo que no tenía ningún problema con El Americano, nunca habían discutido, “pero pensamos diferente”.
Al no ser aceptado, El Americano ingresó a los grupos de autodefensa de Buenavista y después se integró con la gente de Tepalcatepec, principalmente con el comandante cinco, quien tampoco tenía mucha simpatía con Mora porque “salía mucho en la televisión y no arriesgaba la vida, ya que nunca salía de La Ruana”.
Tomó fuerza porque encabezaba un grupo de autodefensas que se extendió a los municipios de Tancítaro, Parácuaro, Aguililla, Múgica, Tumbisatío, La Huacana y Tepalcatepec, entre otros. En mayo pasado fue designado comandante de la fuerza rural e integrante del grupo G250, encargado de perseguir a líderes y jefes de plaza templarios.
Tomado de La Jornada
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