Trump construyó dos campos de golf a los cuales les colocó un muro y ahora exige que sus vecinos lo paguen
Balmedie, un pequeño poblado de Escocia, cuenta con cerca de 2 mil 600 habitantes y está ubicado en la ciudad de Aberdeen, el cual se ha vuelto famoso porque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tiene dos campos de golf, mismos que el año pasado le hicieron perder 25 millones de dólares.
El más afectado de estos campos es el Turnberry Golf Links, que le hizo perder a Trump 23 millones de dólares debido a lo que costó la remodelación del campo y el hotel que completa el complejo turístico. Y por el Trump International Golf Links perdió otros dos millones de dólares.
En este último lugar los pobladores mantienen una lucha desde hace años contra Trump, donde uno de ellos es David Milne, quien vive a unos metros del campo de golf del presidente. En su casa aún exhibe, junto a la bandera escocesa, la bandera mexicana con la que recibió a Trump el 18 de junio del año pasado. Ese día el magnate llegó a Balmedie para encabezar la pomposa inauguración de su campo de golf.
Esta acción fue replicada por al menos otras 20 casas, quienes ondeando la bandera mexicana, querían recordarle al entonces candidato presidencial que su solidaridad estaba con el pueblo mexicano.
La intención de Trump era comprar las tierras de varios vecinos para poder ampliar el campo de golf, pero como ellos no quisieron acceder, construyó un muro alrededor del terreno. Además de esto, al presidente se le ocurrió una “grandiosa” idea: enviarle a los vecinos la cuenta por la construcción de la valla, mismo acción que quiere aplicar en México para que los ciudadanos paguen el muro fronterizo.
Ante la negativa de los vecinos, Trump y su equipo comenzaron a utilizar diferentes tácticas para “convencerlos”: construyeron bancos de tierra alrededor de las casas y sembraron árboles maduros, de hasta siete metros de altura para bloquear la vista al mar de los lugareños. Luego trataron, sin éxito, de convencer a la autoridad local de que obligara a los vecinos a vender y finalmente acusaron a algunos propietarios de robarse su tierra y de dañar equipos de construcción que Trump tenía en el lugar.
“Sí, construyó una valla que yo no quería en mi casa y lo hizo sin consultarlo, en el lugar equivocado y me envió la factura. No pagué y espero que los mexicanos no paguen por el muro que Trump quiere construir contra sus deseos, en el lugar seguramente equivocado”, dijo David Milne en entrevista para El Universal.
Muchas personas en México se emocionaron por lo que habían hecho los ciudadanos de Escocia.
“He recibido una gran cantidad de mensajes de México y los aprecio a todos. Sin embargo, es imposible responder individualmente a todos. Apreciamos su apoyo mi esposa, mis vecinos y yo. He vivido aquí 25 años, construí mi casa con mis propias manos y nadie me va a echar de un lugar privilegiado sólo por su provecho personal, especialmente no un imbécil de color naranja”, comentó Milne.
Cuestionado respecto a que si cree que ellos han contribuido a la mala racha de los campos de golf de Trump, el vecino comentó que lo que hicieron sí tuvo consecuencias, “pero es sólo una parte de la historia. La región, Aberdeen, ha sufrido una importante caída económica debido a la crisis de la industria petrolera. Esto significa que las personas tienen que cuidar más en qué gastan su dinero”.
“El golf no es una prioridad. Además, este deporte parece que está en declive en todo el mundo, los números de golfistas han disminuido en al menos 5 por ciento y el turismo ligado al golf en general también ha bajado. Es una imagen compleja y sólo hemos sido parte de ella”.
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