Nuño no pudo dar su discurso ante los pobladores
“Ya van cinco días del sismo y no tenemos la ayuda de nadie. Dicen que ya fueron a censar las casas y no es cierto”, reclamaron
Habitantes de Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, no dejaron que el titular de la Secretaría de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer, hablara sobre los daños a escuelas provocados por el sismo de 8.2 grados, registrado el pasado jueves.
El titular de la SEP llegó este pasado martes a esta ciudad, acompañado del gobernador Alejandro Murat Hinojosa, para comenzar con la demolición del Centro Escolar de Juchitán, de nivel primaria.
Al momento de que Nuño comenzó a dar su discurso, padres de familia lo abuchearon y le reclamaron la falta de apoyo del gobierno para las personas damnificadas.
Durante una transmisión en vivo, hecha por el periódico El Universal, se escuchó a los pobladores reclamar que “ya van cinco días del sismo y no tenemos la ayuda de nadie. Dicen que ya fueron a censar las casas y no es cierto”.
Ante ello, el secretario sólo atinó a decir: “Déjenme hablar, déjenme decirles a lo que vengo”.
Después de esto, el gobernador de Oaxaca tuvo que intervenir para pedirles a los pobladores inconformes que dejaran hablar al funcionario federal.
“Pido silencio y respeto. Acabamos de vivir una tragedia. Este es un momento de dolor, hemos perdido hogares y familia. Pido que escuchemos al Secretario Nuño”, comentó Murat.
La solidaridad de los habitantes
Luego del sismo de 8.2 grados que dejó 98 muertos y más de 2.3 millones de damnificados, las personas se han unido para ayudar en los centros de acopio a sus paisanos en desgracia, aunque no todos los afectados han recibido víveres.
“Es el día cuatro y muchas personas siguen en la misma situación del día uno”, aseguró al medio RT, Sinaí Méndez, habitante de Oaxaca, entidad que fue la más afectada por el terremoto.
En un momento muy emotivo, entonamos el Himno Nacional con la población de #Juchitán. La fuerza de México somos todos. #FuerzaMéxico pic.twitter.com/P2gd93quPm
— Aurelio Nuño (@aurelionuno) September 13, 2017
“La gente se está quedando en sillas, en el suelo. En varios lugares aún no hay luz. Es comprensible que no puedan volver a sus casas, pero tampoco hay seguridad. Muchos no van a los albergues porque si dejan sus casas, lo poco que les quedó será robado”, aseguró la mujer según una declaración recogida por SinEmbargo.
La situación en la que viven millones de personas incluso ya fue advertida por la Unicef, quienes dieron a conocer un comunicado en el que advertían que “los albergues en Juchitán permanecen parcialmente vacíos durante el día, con pocos adultos al cuidado de los niños, ya que muchos trabajan o tienen que proteger sus hogares de posibles robos”.
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