G500 es el grupo gasolinero con mayor presencia a nivel nacional
Aseguran que el cierre se debe a la inseguridad que viven sus empleados, no a la falta de combustible
El grupo gasolinero más grande del país, el G500, dio a conocer que está analizando el cierre temporal de sus mil 800 estaciones de servicio, instaladas en todo el país.
Esta medida se debe al clima de inseguridad que prevalece en las gasolineras, donde se han registrado actos vandálicos por parte de ciudadanos, quienes también han saqueado combustible y en algunos casos han agredido a los trabajadores, todo esto como protesta por el aumento en el precio de la gasolina, que comenzó el primer día de enero.
Antonio Caballero y Fernández, presidente y director general de G500, comentó que hasta ahorita han cerrado 50 gasolineras de manera intermitente, aunque ya han registrado incidentes en 400 de ellas en toda la República, como la quema de llantas o el intento de extraer gasolina de los tanques aunque sin las medidas y el equipo necesarios, lo cual pone en riesgo tanto a los trabajadores como a los mismos manifestantes.
En la Ciudad de México y su zona conurbada, este tipo de acciones se han registrado específicamente en las partes de Villa Nicolás Romero, Atizapán, Ecatepec, Iztapalapa, Interlomas y Calzada de Tlalpan.
“No queremos ni vamos a ser responsables de las afectaciones que pueda haber, más allá de los heridos que hemos tenido. Estamos anunciando que a partir del día de mañana a las 12 si no tenemos condiciones de seguridad vamos a iniciar cierres por zonas y si es necesario cerraremos todas donde hayamos tenido estas amenazas”, dijo el directivo.
Este grupo gasolinero es el más importante a nivel nacional, ya que cuentan con mil 800 estaciones de servicios que están distribuidas en toda la República, aunque tienen más presencia en el centro del país.
“Le pedimos comprensión a la ciudadanía, al público en general y pedimos apoyo a las autoridades en los tres niveles de gobierno debido a que agentes externos que están incidiendo de manera dramática en nuestras instalaciones con actos de vandalismos”, narró.
Caballero y Fernández negó que estos cierres se deban a una posible falta de suministro de combustible por parte de Petróleos Mexicanos, asegurando que sus tanques están llenos, pero la seguridad de sus empleados no está garantizada.
Lee la nota completa en La Jornada
Sé parte de la conversación