Mientras en Perú su presidente renuncia por acusaciones de corrupción, en México el caso Odebrecht no es investigado
La cancillería mexicana lamenta lo ocurrido en dicho país y expresa su deseo de que la transición gubernamental sea de manera ordenada
Luego de que Pedro Pablo Kuczynski, presidente de Perú, presentara su renuncia este miércoles ante Congreso de su país, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) destacó que el gobierno mexicano lamenta profundamente la situación política en la República del Perú.
Kuczynski decidió dejar el cargo luego de que se le acusara de comprar votos para evitar su destitución, situación de la que responsabilizó a la oposición para forzarlo a renunciar.
Por medio de un comunicado, la cancillería aseguró que el gobierno mexicano confía en que la democracia peruana y la fortaleza de las instituciones garantizarán una transición gubernamental en al marco constitucional y legal de ese país.
De acuerdo con una publicación de Noticieros televisa, el gobierno mexicano reiteró su firme voluntad por continuar estrechando los lazos bilaterales con Perú, así como el exitoso esquema de integración de la Alianza del Pacifico.
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Además el hoy expresidente peruano enfrenta un nuevo proceso tras los señalamientos de que una firma a la que pertenecía recibió pagos de la constructora brasileña Odebrecht, mientras él se desempeñaba como Ministro de Economía.
Mientras en países de Latinoamerica se sanciona a altos funcionarios implicados en el caso Odebrecht, en México personajes como Emilio Lozoya, exdirector de Pemex no son siquiera investigados.
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Por el contrario, diputados mexicanos se han negado a discutir sanciones contra los involucrados en los sobornos de la firma brasileña.
Hace unas semanas en la Cámara de Diputados, los integrantes del PRI celebraron, con aplausos y gritos, que consiguieron impedir la discusión que permitiría a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) iniciar las acciones legales para sancionar a funcionarios que firmaron indebidamente el contrato que favoreció a la empresa Braskem, filial de Odebrecht.
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