El director del IMSS aseguró que los guerrerenses mueren por su condición de pobreza
Sin embargo los funcionarios del gobierno de Astudillo exhiben sus lujos en redes sociales y eventos públicos
El jefe de la oficina del gobernador Héctor Astudillo, Alejandro Bravo Abarca, luce en actos públicos mocasines de la exclusiva marca del diseñador Louis Vuitton, que en el mercado se venden a 570 dólares (11 mil 400 pesos); esto aun cuando el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Mikel Arriola informó que los indígenas de la Montaña de Guerrero mueren por enfermedades causadas por la pobreza y marginación en la que se encuentran. Además las autoridades estatales han asegurado que se encuentran en un periodo de austeridad.
Sin embargo, no es el único que han mostrado sus excesos y la opulencia en la que vive, pues otros funcionarios de la administración de Astudillo han adoptado dicha actitud, mientras tanto la entidad esta azotada por problemas como violencia, inseguridad y rezago social, materias en las que Guerrero se encuentra dentro de los primeros lugares a nivel nacional.
Esto contrasta con el plan de austeridad que prometió el gobernador a principios del año con motivo del incremento de los precios de las gasolinas que causó grandes protestas producto de la indignación en todo el país.
Bravo Abarca ha sido relacionado de manera pública con el narcotráfico y desde hace 20 años se ha desempeñado como funcionario en distintas áreas y ahora dirige una considerada súper secretaria en la gestión de Astudillo porque él se encarga de coordinar los trabajos del secretario particular; secretario privado; secretario auxiliar; coordinación de giras; encargado de medios de comunicación; coordinador de audiencias; coordinador administrativo; jefe de escoltas; jefe de ayudantes, y equipo técnico.
También supervisa las tareas de comunicación social del gobierno estatal; elabora campañas de difusión, emite boletines y comunicados oficiales; clasifica y acredita medios de comunicación y diseñar la imagen y opinión pública del mandatario.
El jueves pasado, el encargado de la imagen pública del gobernador estuvo en un acto oficial realizado en el puerto de Acapulco, y en él portó unas zapatillas modelo Shade Moccasin, de la firma del diseñador Louis Vuitton cuyop precio es de 570 dólares o, en otras palabras, 11 mil 400 pesos.
En el evento se anunció la futura apertura de una tirolesa construida por el empresario Alejandro Hernández, de grupo Autofin, que pasará por la bahía de puerto Marqués. La tirolesa, calificada como un atractivo turístico, comenzará sus operaciones en las próximas vacaciones de Semana Santa.
La semana pasada, en un viaje de trabajo, Mikel Arriola declaró públicamente que los habitantes ( la mayor parte indígenas) de la zona de la Montaña de Guerrero todavía mueren debido a enfermedades vinculadas a su condición social de pobreza y marginación; los principales padecimientos que sufren estas personas son estomacales, respiratorios y maternas.
Pes a esto, el jefe de la oficina del gobernador Astudillo muestra su lujo en eventos especiales lo que se suma a otras muestras de excesos de los funcionarios guerrerenses que ya han documentado los medios de comunicación en reiteradas ocasiones. El ejemplo más destacable es el del gobernador y su gusto por los relojes de lujo, así como sus colaboradores de tercer nivel que en redes sociales presumen sus paseos en aeronaves privadas a restaurantes exclusivos u otros destinos turísticos del país como Los Cabos y Quintana Roo.
Fuente: Proceso
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