El nombramiento de Fidel Herrera Beltrán, exgobernador de Veracruz, como cónsul en Barcelona, sigue generando críticas entre los mexicanos y analistas, debido a sus presuntos vínculos con el crimen organizado y los escándalos durante su gobierno.
Gonzalo Boyé, abogado y asesor del European Center for Constitutional and Human Rights, de Berlín, agrupación que ha tratado temas relacionados a derechos humanos en ese continente, expresa su preocupación por la designación del priista.
“Lo grave que resulta que el gobierno de España haya brindado elexequatur (autorización definitiva) para este cónsul mexicano. Una labor mínima de los cuerpos de inteligencia españoles podía haber corroborado el perfil del personaje, como el hecho de que su nombre fue mencionado por testigos sometidos a procesos por blanqueo de capitales en tribunales en Estados Unidos”, dijo el especialista.
El 26 de octubre, en visita a la embajada de México en Madrid, Herrera adelantó que su prioridad es conseguir la reanudación del vuelo México-Barcelona.
Su llegada a Cataluña fue mal vista por la comunidad mexicana que vive ahí. Incluso los escritores mexicanos Juan Pablo Villalobos, Jordi Soler y Laura Restrepo declinaron participar en unas sesiones literarias dentro del Festival MXaBCN, realizado en la comunidad autónoma española, por un “conflicto de conciencia” tras la llegada de Herrera.
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