¿Por qué Gordillo pasó la mayoría de su condena en hospitales?
Los abogados de la exlíderesa magisterial consiguieron que pasara sólo cuatro días en el penal, y el resto en hospitales y en su lujoso departamento
La noche de este martes, un magistrado federal dejó en libertad a la exlideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo, luego de un proceso de más de cinco años.
Gordillo fue detenida en 2013, acusada de lavado de dinero, operación de recursos de procedencia ilícita, evasión fiscal y delincuencia organizada, sin embargo, su encierro no fue el de un reo común, pues solo estuvo cuatro días tras las rejas, y el resto del tiempo lo pasó en hospitales y en prisión domiciliaria.
El principal argumento para que Elba Esther pudiera evitar la cárcel, fue tanto su avanzada edad como sus dolencias físicas, por lo que en estos cinco años recorrió varios hospitales hasta que finalmente consiguió irse a su departamento en la colonia Polanco de la Ciudad de México.
Todo comenzó cuando al día siguiente de su detención el médico de cabecera de Gordillo solicitó que ésta fuera internada en un hospital debido a que en general presentaba un precario estado de salud, lo cual, sumado a la donación de riñón que había hecho hace tiempo la ponía en riesgo de tener hepatitis C.
De acuerdo con una nota de Nación 321, fue así que logró que le dieran el alta del Sistema Penitenciario del Distrito Federal para mudarse a Santa Martha Acatitla de Tepepan, en donde permaneció por más de cuatro años en la Torre Médica de especialidades.
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Esta larga estancia estuvo llena de comodidades. En ese entonces el diario Reforma reveló que la maestra tenía acceso a una regadera privada, zapatos de marca, mensajero motorizado, y una carta amplia de alimentos como pescado, espagueti y agua Fiji.
Contaba con acceso a otros privilegios como clase de yoga y de meditación, una entrenadora personal, y una habitación equipada con libros, sin mencionar que su comida era preparada en casa por su hija.
Luego de cuatro años y 10 meses de estar presa en Santa Marta, los abogados de Gordillo consiguieron el arresto domiciliario argumentando nuevamente tanto su edad como la decadencia de su bienestar físico.
Por ello en diciembre de 2017, autoridades la liberaron del hospital en la madrugada, y fue trasladada a un departamento en la colonia Polanco, donde permaneció hasta el día de ayer, cuando finalmente logró ganar los procesos por los delitos que se le imputaban.
Sin embargo no se trata de un departamento común y corriente, sino de una construcción de lujo, compuesta por 380 metros cuadrados que incluía tres recámaras y una sala; un comedor, un cuarto de servicio y un balcón.
La exlíderesa era monitoreada por una mujer policía y tenía reglas estrictas de visita.
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