Los indígenas de México siguen siendo ciudadanos de quinta, no son tomados en cuenta.
Este sector de la población vive en el abandono de las autoridades, sumidas en la pobreza y siendo desplazados de sus comunidades.
A esta situación se suman las bajas temperaturas, mismas que han comenzado a cobrar vidas de adultos y niños.
Este es el México real, el que no se ve en las campañas y en la boleta electoral, ese en el que los desplazados mueren de frío y de hambre en pleno inicio de Precamapañas.
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