Los comicios del próximo domingo en el Distrito Federal, para elegir a jefes delegacionales y diputados locales, serán la culminación de un proceso electoral plagado de acusaciones entre partidos, guerra sucia y de una violencia inaudita y con altos niveles de confrontación, coincidieron analistas políticos con experiencia en la capital del país.
Quizá el episodio más grave de violencia electoral en la Ciudad de México fue el enfrentamiento que la medianoche del 6 de mayo hubo en la colonia San Mateo Tlaltenango, en Cuajimalpa, y sobre las cuales el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se acusaron mutuamente.
Ambos partidos responsabilizaron a su oponente político de haber comenzado la agresión. El PRD sostuvo que sus brigadistas habían sido agredidos por personas que trabajarían para el PRI, mientras que el tricolor aseguró que un numeroso grupo de perredistas había agredido a tres de sus candidatos cuando éstos habían acudido al llamado de vecinos que denunciaron que los perredistas supuestamente estaban quitando su propaganda. El saldo, según el organismo político fue de 20 heridos.
No fue ese un evento aislado, sino que ocurrió en un contexto en el que fueron comunes las denuncias de agresiones a integrantes de los equipos de campaña, brigadistas o en algunos casos incluso a los candidatos a cargos de elección popular.
El clima de agresiones mereció pronunciamientos de líderes de los partidos, así como de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Ciudad de México, que advirtió de la existencia de “focos rojos” en ocho de las 16 delegaciones capitalinas, tanto por los enfrentamientos entre brigadas de los partidos políticos como por la presencia de grupos que intentaban intimidar o por el robo de propaganda electoral.
El PRI, el Partido Acción Nacional (PAN) y el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) también señalaron que Gustavo A. Madero, Magdalena Contreras y Tlalpan son delegaciones proclives a la violencia electoral. El presidente panista en la capital del país, Mauricio Tabe Echartea, consideró como “focos rojos” a Miguel Hidalgo (delegación que intenta arrebatarle al PRD) e Iztapalapa (demarcación que se disputan el PRD y Morena).
Un caso especial es la Delegación Coyoacán, donde candidatos de seis partidos se unieron para denunciar agresiones a brigadistas y equipos de candidatos, supuestamente cometidas por grupos afines al delegado con licencia Mauricio Toledo, y el candidato perredista a jefe delegacional, Valentín Maldonado. Los quejosos fueron el PAN, PRI, Morena, Nueva Alianza, Partido Humanista y Movimiento Ciudadano.
En este contexto, el presidente del Comité Ejecutivo de Morena, Martí Batres Guadarrama, incluso declaró que la violencia electoral en la capital del país se había desbordado porque no se habían atendido los problemas cuando los señalaron. Según Batres, no se había visto este nivel de violencia desde la época en que el PRI gobernaba la ciudad.
El ex consejero del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) Eduardo Huchim May calificó como “violencia inusitada” la que se está dando en esta contienda electoral.
En el caso de la capital del país consideró que se trata de una situación insólita, pues si bien ha existido siempre cierta rispidez en las campañas electorales, “estamos llegando a estratos que no habían sido frecuentes antes”.
Para Héctor Tejera Gaona, académico de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), quien tiene experiencia de más de 20 años trabajando procesos electorales en el Distrito Federal, no es esta la elección más violenta en la capital del país. En su opinión lo que ha aumentado es el nivel de confrontación.
Por lo demás, expresó que todos los partidos “juegan el mismo juego”, es decir una estrategia en la que todos violan todas las normas.
Tejera Gaona ejemplificó con el caso de la propaganda: “En el día acusan a los otros de haberles quitado la propaganda, en la noche van a quitar la propaganda de los otros”.
El ejemplo ayuda a explicar también el origen de la violencia, pues varias de las agresiones a brigadistas se dieron en un contexto similar.
LUCHA POR EL PODER, CAUSA DE VIOLENCIA
En lo que sí coinciden los especialistas consultados es que una de las razones que explican esta vivencia inusitada es que la división de la izquierda política podría ocasionarle pérdida de espacios al PRD. Una consecuencia de esa eventual pérdida es que los grupos al interior del partido, o con los que tiene acuerdos o negociaciones a nivel territorial, recurren a la violencia y a la guerra sucia como medida desesperada para intentar mantener el poder.
Una respuesta similar, recordó el académico de la UAM, la tuvo el PRI en 1997, cuando perdió el control de la capital del país ante el PRD, partido que hoy tiene la Jefatura de Gobierno, 14 de 16 delegaciones y la mayoría en la ALDF.
Sin embargo, Huchim May puntualizó que no toda la violencia es atribuible al PRD por esta razón, pues también un segmento del PRI capitalino, liderado por el defenestrado Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, ha dado muestras de violencia desde su lugar como partido de oposición.
Durante las campañas electorales muchas de las agresiones fueron atribuidas a grupos ligados al PRD o de plano a sus brigadistas. No obstante, el enfrentamiento en Cuajimalpa mostró que las agresiones podían provenir también de otros frentes.
Tejera Gaona habló específicamente al caso de “Los Claudios”, una banda delincuencial señalada de supuestamente tener vínculos con altos funcionarios y ex funcionarios delegacionales y a quien el PRD responsabiliza de las agresiones a sus brigadistas en esa demarcación. Dijo que particularmente ese tipo de casos –el uso de grupos de choque para amedrentar a sus contrincantes– no se habían presentado con anterioridad durante una contienda electoral.
No obstante, sobre otro tipo de hechos violentos, como los enfrentamientos entre brigadistas por el retiro de propaganda, consideró que si bien denunciarlos es justificado, alimentan una falsa impresión de la violencia, haciéndola parecer de mayor magnitud a la que realmente tiene.
En todo caso, expuso Huchim May, la violencia en el Distrito Federal es diferente a la que ocurre en otras partes del país. En el caso de la capital, dijo, “se explica la violencia por esta pugna de tipo político, evidentemente de ganar espacioso de poder, cargos públicos”, así como por el deterioro en la calidad de las campañas políticas.
RECUENTO DE AGRESIONES
Durante esta contienda electoral, los cuatro principales partidos políticos en la capital del país han denunciado haber sufrido agresiones. En la mayoría de los casos denunciados por los partidos de oposición, acusan al PRD como el agresor. El partido del Sol Azteca, a su vez, ha señalado a uno de sus contrincantes políticos -el PRI- como responsable de las agresiones en su contra.
Frente a ello, el ex consejero el IEDF, Huchim May, apuntó que más allá de los intereses partidarios que hayan motivado las agresiones, deben investigarse y castigarse “sin distingos partidarios, ni de quienes son los autores de esas infracciones y tampoco de quienes son las autoridades, a qué partido pertenecen, en el Distrito Federal”.
Sin embargo, un obstáculo a lo anterior es que no todas las denuncias que se han hecho públicas ante los medios de comunicación han derivado en denuncias formales ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).
A continuación, presentamos un recuento de algunas de las agresiones que han denunciado los partidos PAN, PRD, PRI y Morena.
PAN
De acuerdo con información proporcionada por el área de Comunicación Social del partido, han registrado al menos ocho eventos de incidentes y agresiones durante la campaña.
El primero fue el 18 de abril en la Delegación Miguel Hidalgo, cuando brigadistas del PAN y PRD se enfrentaron en el mercado “América” de esa delegación. De la gresca resultó lesionada una bebé de seis meses. Por este hecho se presentó una denuncia ante la Fiscalía del Menor.
El 11 de mayo, en Miguel Hidalgo, una persona amenazó con un arma punzocortante a sus abanderados. Una semana después se presentó denuncia por este hecho ante la PGJDF.
Un día después, en Magdalena Contreras vandalizaron las oficinas del Comité Directivo Delegacional del PAN.
El 15 de mayo en Iztapalapa un grupo de “provocadores”, al que Acción Nacional identificó con el PRD, cercó y amenazó a una brigada.
El 27 de mayo, brigasdistas del PAN fueron agredidos por supuestos brigadistas del PRD. Dos días después, en la misma delegación, otros brigadistas fueron amenazados y perseguidos por un supuesto grupo de choque del PRD. Uno de los brigadistas fue golpeado, por lo que requirió hospitalización y recibió cuatro puntadas por las lesiones ocasionadas en la cabeza.
El 30 de mayo, en la delegación Álvaro Obregón un brigadista fue agredido. El PAN señaló a los agresores como “un grupo de choque identificado con el PRD”.
El 1 de junio, a dos días de concluir las campañas, un brigadista de la Delegación Álvaro Obregón fue golpeado, “dejando secuelas graves en su rostro”, según reportó el partido. En este caso no tienen identificado al posible agresor.
El PAN acusó también que las brigadas del PRD estaban armadas con cuchillos y pistolas. Además señaló a ese partido de amenazar y agredir a sus candidatos e integrantes de sus equipos de campaña, así como de cometer actos vandálicos.
Incluso el pasado 18 de mayo su presidente local, Mauricio Tabe, presentó una denuncia de hechos ante la PGJDF contra el líder del PRD, Raúl Flores García. Entonces Tabe denunció que en las delegaciones Tlalpan, Magdalena Contreras, Iztapalapa y Miguel Hidalgo sus candidatos habían sufrido amenazas por parte de grupos armados.
PRD
El presidente del PRD capitalino en una conferencia de prensa enlistó las agresiones que sufrieron durante las campañas.
Acusó que la primera agresión fue todavía en época de precampañas. Ocurrió en Cuajimalpa, donde el 16 de abril agredieron a una integrante del equipo de una candidata.
Recién iniciadas las campañas, en los primeros minutos del primer día de la contienda fueron agredidos funcionarios del Distrito Federal, entre ellos el director del Registro Civil, Héctor Maldonado. No se encontraban haciendo actos de campaña, por lo que Flores García consideró que fueron agredidos “sólo por ser perredistas”.
Maldonado fue golpeado , cuando cenaba cerca de su casa en Cuajimalpa, y por las lesiones causadas requirió tomografías y una cirugía plástica, de acuerdo con el líder priista local.
La siguiente agresión fue a los brigadistas del partido en Cuajimalpa. La primera ocurrió a mediados de abril; la siguiente fue la de la madrugada del 6 de mayo. En ambos casos se señaló a “Los Claudios” como responsables.
La más reciente agresión ocurrió hace tres días. Flores García explicó que en la calle de José María Vértiz, un grupo de golpeadores, supuestamente al servicio del PRI agredió a un candidato.
Asimismo dijo que el grupo de golpeadores se encontraba bajando propaganda del PRD y colocando propaganda del PRI.
PRI
Tras el enfrentamiento entre perredistas y priistas en Cuajimalpa, el presidente del PRI capitalino, Mauricio López Velázquez, dijo que los hechos violentos no eran exclusivos de la delegación Cuajimalpa, pues los priistas también habían sido víctimas de agresiones en Coyoacán, Cuauhtémoc, Tláhuac, Xochimilco y Gustavo A. Madero.
Detalló que en Coyoacán fue vandalizada una de sus casas de campaña.
En Tláhuac, varios sujetos destruyeron el automóvil de la hija de una de sus candidatas, tras un recorrido por la Colonia Selene. En esa delegación y en Xochimilco integrantes de los equipos de campaña también fueron agredidos.
En Cuauhtémoc propietarios de establecimientos mercantiles han sido amenazados con sanciones en caso de que permitieran la colocación de propaganda de otros partidos en sus locales.
Por los actos vandálicos en Coyoacán y el ataque a la casa de campaña, así como por ataques a personal en Xochimilco y Tláhuac fueron presentadas denuncias ante la PGJDF, de acuerdo con el área de Comunicación Social del partido.
A esas agresiones se podría sumar el asesinato de Israel Hernández Favela, coordinador de campaña en Azcapotzalco, el pasado 28 de mayo, aunque no se ha determinado que fue un crimen relacionado con la actividad política.
MORENA
El partido denunció agresiones a sus militantes en la Delegación Magdalena Contreras, que consistieron en agresiones físicas a brigadistas, amenazas a quienes manifestaban su apoyo a ese partido y retiro y destrucción de propaganda.
También acusaron la retención de brigadistas y activistas de Morena en Azcapotzalco por parte de patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina.
Además, denunciaron una agresión en Iztapalapa de un grupo llamado “Los Lobos” durante un evento en el que Andrés Manuel López Obrador dio un conferencia.
En Iztapalapa, Morena también acusó que sus brigadistas fueron insultados por personas supuestamente identificadas con candidatos perredistas.
Además señaló la supuesta existencia de grupos armados del PRI en esa demarcación.
Destaca el caso de una supuesta agresión del equipo de campaña en Iztapalapa. El sujeto acusado de la agresión era padre de un menor asesinado por la policía durante el periodo 2009-2012.
De agredido, Morena pasó a ser agresor, pues el PRD lo acusó de supuestamente hacer un montaje político para aparentar que el PRD estaba sembrando violencia en esa delegación.
Otro caso en donde Morena fue señalado como agresor ocurrió en la Delegación Magdalena Contreras, cuyo jefe delegacional acusó a militantes de Morena por supuestamente provocar un zafarrancho durante un evento público que él encabezaba, en el que los morenistas habrían agredido a servidores públicos de la delegación.
Fuente: Sin Embargo
Sé parte de la conversación