Tenangos, uno de los diseños más plagiados
Empresas como Nestlé y Mango, además de diseñadores de modas españoles y franceses, se han visto involucrados en el plagio de ideas de artistas mexicanos en varias ocasiones
Por Juventino Montelongo
soyquiroz@gmail.com
A principios de esta semana se dio a conocer el caso de un grupo de artesanos de Tenango de Doria, en Hidalgo, que están en una lucha legal en contra de la empresa extranjera Nestlé, particularmente con su planta de México, a quien acusan de robarse sus diseños.
Adalberto Flores Gómez y su esposa, Angélica Martínez descubrieron cómo empresas extranjeras se han robado sus diseños: desde septiembre de 2016 están en pleito con la empresa Nestlé México, ya que en 2015 dicha compañía sacó a la venta una colección de tazas de chocolate Abuelita que, acusan, utilizó dibujos similares a los que ellos han producido.
“Me di cuenta porque fuimos a Aurrerá y vimos las tazas con chocolates Abuelita; venían dibujos de Chiapas, Oaxaca y nuestros tenangos; una figura que venía ahí era uno de mis dibujos”, recordó Adalberto, quien entre sus diseños se encuentra un venado, un colibrí y un armadillo.
No son casos aislados
Ellos dos recordaron otros casos similares que han sufrido los artesanos mexicanos. Debido a la gran popularidad y aceptación de sus diseños, grandes empresas como la marca de ropa Mango, han robado iconografía de los artesanos de Hidalgo.
El robo de tenangos por parte de la marca Mango
A principios de octubre varios usuarios de las redes sociales comenzaron a criticar a Mango al acusarla de plagio. Dicha marca venía a mil 599 pesos un suéter con bordados originales de Hidalgo, conocidos como “tenangos” y pronto comenzaron las críticas en contra de ella.
Por qué se roban lo nuestro, por que se jactan de bordados tradicionales que no les pertenecen #plagio @Mango #consumelocal #tenango pic.twitter.com/TPUA4wZizx
— Marijose Flores (@MariXoOoO) October 8, 2017
Todo plagio es grave. Corporación Mango se roba bordado de de la comunidad indígena de Tenango. Via @erandi_san @Mango @DeniseDresserG pic.twitter.com/RkWpKvqdfM
— Tlatoani_Cuauhtemoc (@Cuauhtemoc_1521) October 11, 2017
Les gusta este suéter??? Cómprenselo a las mujeres de Tenango que diseñaron los bordados, no a @Mango que se robó los diseños. https://t.co/pIybukmg2s
— Tania Tagle (@Tania_Tagle) October 11, 2017
Comunidad oaxaqueña acusa a marca española
Sin embargo, estos no han sido los únicos casos en donde empresas extranjeras se roban diseños mexicanos y los hacen pasar como suyos.
En febrero de este año, la comunidad oaxaqueña de San Juan Bautista Tlacoazintepec acusó a la marca española Intropía por haber plagiado el diseño de un huipil, de uso diario, mismo que además vendía como un “bordado azteca”, que no tiene nada que ver con la identidad y cosmovisión de dicha comunidad.
Mediante una publicación de Facebook, señalaron que dicho robo era un “verdadero despojo a nuestra cultura y a nuestra historia”, por lo que pidieron que se proteja a los pueblos indígenas de “tales despojos”.
“Nos molesta mucho que copien nuestros diseños porque no saben ni siquiera lo que significa el bordado del textil, y todos los elementos que lo integran”, acusaron en dicha red social.
Otra de las críticas era el precio en el que vendían tales productos, ya que ellos los venden entre 300 y 500 pesos, mientras que la marca española los vendía en 4 mil 474 pesos, es decir, 198 euros.
“No buscamos hacer un demanda ni tener regalías. Nuestro objetivo es que la marca haga un reconocimiento a la cultura chinanteca. Que reconozca que el diseño en el que se basan ellos es el mismo que hacemos en San Juan Tlacoazintepec”, acusó Omar Olivera, uno de los integrantes del colectivo que denunció dicho plagio.
Diseñadora francesa se roba ideas de oaxaqueños
Anterior a esto, en noviembre de 2015, habitantes de la comunidad de Santa María Tlahuitoltepec, en Oaxaca, enfurecieron luego de que la nueva colección de alta costura de la francesa Isabel Marant robara sus diseños.
En particular señalaron que Marant plagió el bordado de una blusa, la cual es descrita por la francesa como “tribal, sin demasiado detalle”. Y pese a ser de “nueva” colección, los pobladores señalaron que dicho diseño es utilizado por la gente desde hace cientos de años.
Debido a esto, en su momento lanzaron el hashtag #MiBlusaDeTlahui con el cual buscaban hacer un llamado a todos los mexicanos para defender su cultura tradicional del robo de empresas extranjeras.
La exigencia de los habitantes de la comunidad de Tlahuitoltepec era que Marant se deshiciera de los diseños y los compensara económicamente.
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