La mujer y su pareja guardaron el cuerpo en una caja de juguetes
Ella fue declarada culpable de homicidio en primer grado y otros cuatro cargos de abuso infantil
Raquel Barreras, de 44 años de edad, fue condenada a cadena perpetua más 24 años de prisión por haber matado de hambre a su hijo de tres años de edad y guardar el cuerpo en una caja de juguetes.
De acuerdo con la publicación de Noticieros Televisa, los delitos ocurrieron entre el 2013 y 2014, en Tucson, Arizona, EU. La mujer actuó en complicidad con su pareja, Martín Barreras.
El dueño de la casa, donde la pareja abandonó el cuerpo del niño, fue quien encontró los restos y de inmediato reportó los hechos a la policía para que detuvieran a la pareja.
El Departamento de Seguridad Infantil fue señalado durante el juicio por no verificar la situación del menor y tres de sus hermanos mayores, pese a que sabían que los padres eran adictos en recuperación.
Debido a los antecedentes, en el 2010, dicha institución había tomado la custodia de los niños pero luego los devolvió a la pareja, con el pretexto de que Martín ya había terminado con su programa de desintoxicación y su esposa estaba en el proceso.
Tras una serie de investigaciones, un juez declaró a Raquel culpable de homicidio en primer grado y otros cuatro cargos de abuso infantil, ya que no solo privó a su hijo de alimento sino que también le prohibió jugar y hablar.
Por su parte, Martín enfrentará cargos por abuso infantil y espera ser enjuiciado el próximo 6 de agosto.
Sé parte de la conversación