Comunidades indígenas y campesinas interpusieron un amparo contra dicho proyecto en 2019
Comunidades de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, así como organizaciones civiles, obtuvieron una suspensión a obras del Tren Maya en un tramo, al considerar que puede generarse un daño irreparable al ambiente.
El Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) informó que una jueza otorgó la medida a las comunidades indígenas, campesinas, urbanas y costeras que interpusieron un amparo contra dicho proyecto en julio de 2019.
“No se podrán ejecutar obras nuevas con relación al proyecto Tren Maya en el tramo 2, que abarca de Escárcega a Calkiní, en el estado de Campeche”, se lee en un documento publicado por CEMDA.
El dictamen señala que las comunidades afectadas en este tramo podrán llevar un proceso judicial “sin que se realicen obras que podrían generar daños irreparables, lo cual constituye un beneficio para la sociedad en general”.
De acuerdo con el CEMDA, los argumentos que se incluyeron en la demanda de amparo fueron que el proyecto ferroviario se dividió indebidamente en siete tramos y no se puede dimensionar en su totalidad las afectaciones ambientales que el proyecto causaría.
Agregó que el Tren Maya quebrantará los diversos ecosistemas que se tienen en la Península de Yucatán, con afectaciones a los corredores biológicos y área naturales protegidas.
Será el Fondo Nacional de Promoción al Turismo (Fonatur), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Presidencia de la República, el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), las autoridades que deberán acatar la suspensión, detalló el portal Animal Político.
Tampoco se podrán realzarse obras nuevas contempladas, según la reciente Autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental de la Fase 1 del Tren Maya, otorgada por Semarnat.
Sé parte de la conversación