Silva-Herzog hizo una dura crítica a López Obrador en su columna de esta semana
La tarde de hoy, Andrés Manuel López Obrador, precandidato a la Presidencia por la coalición “Juntos Haremos Historia”, respondió a Jesús Silva-Herzog Márquez por las críticas que hizo en su columna semanal en el diario Reforma.
“El peligro de AMLO 3.0 es otro. Del extremo del sectarismo, López Obrador se ha desplazado al punto contrario: el oportunismo. Su coalición no es ya ni sombra de su base política. Morena ha sido traicionado antes de ganar el poder”, escribió el columnista, quien también criticó que ahora el tabasqueño arrope a panistas y priistas en su partido.
“El caudillo lo ha entregado al cálculo de sus ambiciones. La lealtad de hoy puede vencer a la deshonestidad de ayer; los mafiosos pueden transformarse en abanderados de la regeneración nacional, los bandidos pueden ser perdonados por la infinita bondad del prócer. Morena ya ha sido sacrificada. Al caudillo le sirven los foxistas, los calderonistas, los zedillistas, los salinistas. Todos caben, ha dicho la presidenta de Morena”, expresó Silva-Herzog.
Las críticas vertidas en la columna no pasaron desapercibidas para el precandidato de Morena, quien le respondió a Silva-Herzog a través de Twitter.
Hace tiempo que Jesús Silva-Herzog Márquez me cuestiona con conjeturas de toda índole. Hoy, en el periódico Reforma, me acusa sin motivo de oportunista. Ni modo, son tiempos de enfrentar a la mafia del poder, a sus secuaces y articulistas conservadores con apariencia de liberales
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) 5 de febrero de 2018
Destacó que el escritor lo acusa “sin motivo de oportunista” y que lo ha cuestionado con conjeturas “de toda índole”.
Por su parte, el columnista decidió contestar al político a través de la misma red social y le pidió leer al autor Alejandro Rossi, además de ser tolerante ante las críticas y respetar a los que piensan distinto a él.
Lea a Alejandro Rossi, @lopezobrador_
El talante liberal es la convicción de que un error intelectual no supone necesariamente un defecto moral. De esa premisa… se desprende la verdadera tolerancia intelectual, tan distinta a la aceptación cobarde o a la incapacidad crítica.— Jesús Silva-Herzog M (@jshm00) 5 de febrero de 2018
En un segundo tuit aseguró que estar en desacuerdo con sus acciones no significa estar a favor de “la mafia del poder”.
Ojalá aceptara alguna vez, don @lopezobrador_ que la discrepancia no es inmoralidad. Criticarlo a usted no es entregarse a la mafia. Si no aceptamos que hay razones para el desacuerdo, el diálogo no tiene sentido.
— Jesús Silva-Herzog M (@jshm00) 5 de febrero de 2018
El texto al que se refiere López Obrador, apareció bajo el título “AMLO 3.0” (lo puedes leer completo aquí) y en él se habla acerca de la diferencia del movimiento que inició Andrés Manuel hace años y los cambios que hay en la actualidad.
Destaca que las personas que actualmente rodean al tabasqueño no son los mismos que lo han seguido siempre, “no son fervorosos de su causa, aunque en este momento sirvan a su ambición”.
Esto en referencia a la actual apertura del precandidato para incluir a todas las personas de “buena fe” que quieran sumarse a su movimiento.
Esa decisión le ha valido numerosas críticas, pues se han integrado a las filas de Morena, desertores de otros partidos como Gabriela Cuevas y Alfonso Durazo, así familiares cercanos de la Elba Esther Gordillo.
La respuesta de López Obrador a Silva-Herzog abrió la puerta a que varias figuras públicas lo señalaran como intolerante e incapaz de aceptar las críticas.
Esta es una de las peores caras de @lopezobrador_
Incapaz de recibir cualquier crítica lleva sus ataques a las personas y no a los argumentos y pinta su relación con cualquiera que no sea su incondicional. https://t.co/sybvGviuKH— Mario Campos (@mariocampos) 5 de febrero de 2018
… O son tiempos de debatir, deliberar, responder con argumentos y sin descalificaciones, de dar certezas a quienes te pensamos como respuesta a varias preguntas que lanzan 18 años de democracia, entre ellas las que apunta JSHM y que, al menos yo, comparto. Así, como preguntas. https://t.co/YQvi6GQG48
— José Merino (@PPmerino) 5 de febrero de 2018
Descalificar al crítico en lugar de rebatir su crítica. Atribuirle intenciones inconfesables a quien discrepa antes que reconocerle el derecho a no estar de desacuerdo.
Ese es el modus operandi de un déspota, no de un demócrata.
Es preocupante.https://t.co/zHcYpi30yb
— Carlos Bravo Regidor (@carlosbravoreg) 6 de febrero de 2018
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