Antes de ser juzgado, el Vaticano ya lo había perdonado
De acuerdo con el Foro Oaxaqueño para la Niñez, el juez “no encontró elementos de culpabilidad contra” el padre Gerardo Silvestre Hernández
Por Juventino Montelongo
En 2013, el padre católico Gerardo Silvestre Hernández fue detenido al estar relacionado con la violación de dos niños, en la comunidad de Villa Alta, en el estado de Oaxaca, aunque de acuerdo con el número de las comunidades en donde estuvo trabajando, prevén que los casos puedan llegar a 100, informó el Foro Oaxaqueño de la Niñez (Foni).
A pesar de esto, el juez mixto de primera instancia del distrito judicial de Villa Alta, Juan Raúl Aquino Geminiano, donde ocurrieron los hechos, sólo lo condenó por uno de los casos apenas el mes pasado, de acuerdo con el expediente 01/2014.
La sentencia fue de 16 años y seis meses de prisión, pero como había sido detenido desde 2013, se le redujeron tres años de encarcelamiento.
A Silvestre Hernández también se le impuso una multa de 46 mil 169 pesos y el pago de una reparación del daño por 8 mil 800 pesos, así como 25 mil pesos para resarcir el daño moral ocasionado a la víctima.
El Foni aseguró que aún desconocen el porqué no se le dictó sentencia por al menos los dos casos que estaban documentados.
Comentaron que una de las causas sería que el abuso contra uno de los niños no quedó bien acreditado, aunque aún no reciben una copia de la sentencia, por lo que no están seguros por qué el juez no lo castigó por el otro caso.
“Es sólo por una denuncia en la que se incluía el caso de dos niños, sin embargo el juez sólo consideró uno, ya que en el otro supuestamente no encontró elementos de culpabilidad contra Silvestre”, acusaron.
Actualmente, el Foro está exigiendo al Estado una mejor investigación para que el padre sea sentenciado por más casos en los que está relacionado.
Cabe señalar que anteriormente, en 2016, la madre de una de las víctimas escribió una carta dirigida al Papa Francisco, en la que exigía justicia para los niños y castigo para quien resultara responsable de los hechos.
Posteriormente, el Vaticano, a través de la Congregación para la Doctrina de la Fe, señaló que después de haber “estudiado detenidamente” el caso no encontró una “denuncia verosímil que justifique la intervención” de las autoridades de la iglesia católica, acusando que la “causa queda desestimada”, así, invitó a las partes involucradas a simplemente dialogar sobre el tema, como si eso fuera suficiente para reparar el daño que sufrieron los niños.
Ante esto, las personas que dieron a conocer el caso, acusaron la complicidad del Arzobispo José Luis Chávez Botello, señalando que encubrió al padre violador.
El Foro Oaxaqueño estuvo reuniendo diferentes declaraciones de los menores en donde narraban cómo el padre Silvestre Hernández los inducía a actos sexuales, dándoles bebidas alcohólicas y exponiéndolos a videos pornográficos.
Todo esto quedó documentado en video, donde las víctimas del padre dieron a conocer a detalle los hechos que sufrieron. A pesar de ello, el juez desestimó las pruebas presentadas, y de 100 posibles casos, sólo castigó a uno de ellos.
ACTUALIZACIÓN: El sacerdote ya fue sentenciado
Sé parte de la conversación