Aumentaron la cifra de violaciones a las garantías individuales
Durante el año pasado se registraron 36 mil 56 asesinatos, frente a los 33 mil 17 que hubo en 2015, lo cual se ha convertido en la cifra más elevada dentro del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto
Por Juventino Montelongo
La organización Amnistía Internacional presentó su informe anual 2016/2017 en el que aseguró que durante el año pasado, México vivió su peor crisis en derechos humanos.
El informe, que recoge información sobre la situación de los derechos humanos a nivel internacional, dedicó uno de sus apartados a México.
Ahí, informó que en 2016, nuestro país sufrió por ejecuciones extrajudiciales, violencia contra mujeres y niñas, amenazas y asesinatos cometidos contra periodistas, además de que se sigue empleando personal militar en operaciones de seguridad pública.
A más de 10 años de la llamada “guerra contra el narco” desatada en la administración de Felipe Calderón, Amnistía señaló que la violencia no ha cedido terreno durante el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, ya que durante el año pasado, se registraron 36 mil 56 asesinatos, frente a los 33 mil 17 que hubo en 2015, lo cual se ha convertido en la cifra más elevada dentro del gobierno de EPN.
En la presentación de este informe anual, la directora ejecutiva de la sección mexicana de la organización, Tania Reneaum Panszi, aseguró que estamos en una de las peores crisis de derechos humanos y justicia en México, enfrentando varias “amenazas”.
“Como la violencia generalizada, los constantes ataques contra defensores de derechos humanos y la violencia endémica contra las mujeres, mientras peleamos también por asegurar la protección de las personas en movimiento en el país cuyas vidas están en riesgo por la retórica de odio que tiene grandes consecuencias para las personas mexicanas”, señaló Panszi.
Además de Panszi, durante la presentación del informe estuvo Sofía Quintero, una joven de 22 años que llegó a México huyendo de las pandillas de Honduras; Erika Guevara Rosas, activista feminista y directora de Amnistía en las Américas; e Idelfonso Zamora, defensor del medio ambiente y miembro de la comunidad indígena del centro de México.
Ahí, acusaron que el informe es un reflejo de los niveles récord de violencia y desigualdad, que se sumaron a una “impunidad generalizada” que causó un retroceso para los derechos humanos de “niveles históricos”.
“Seguimos viendo casos de impunidad como Tlatlaya, Ayotzinapa y Tanhuato, y sigue habiendo fallos constantes en la realización de investigaciones prontas y expeditas”, dice el documento.
El informe también dio a conocer que para finales de 2016, hubo 29 mil 917 personas desaparecidas, aunque no se contaron los casos clasificados como secuestro o trata, al no entrar en el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas.
Otros de los puntos alarmantes dentro de la crisis de derechos humanos, aseguró Amnistía, fueron las ejecuciones extrajudiciales, donde los culpables gozan de impunidad ya que los casos no se investigan adecuadamente.
AI señaló que durante tres años seguidos, “las autoridades no publicaron la cifra de personas muertas o heridas en enfrentamientos con la policía y las fuerzas militares”. Esto, mientras las cifras de fosas clandestinas fueron en aumento.
Para la organización, si estos delitos se mantienen tal como están, las consecuencias serán devastadoras, por lo que “el Estado es el responsable de concentrar sus esfuerzos para buscar soluciones estructurales para poner fin a la impunidad y garantizar el acceso a la justicia en casos de violaciones graves a los derechos humanos”.
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