La PGR no dio a conocer los detalles del agresor para no entorpecer la investigación
Guevara propuso un punto de acuerdo en el Senado para combatir la violencia contra las mujeres
De acuerdo con la Procuraduría General de la República (PGR), existen sospechas de que uno de los agresores de la senadora del Partido del Trabajo (PT), Ana Gabriela Guevara, podría ser policía en servicio o inactivo, cuyo lugar de residencia estaría en la Ciudad de México.
Las autoridades aseguran que ya han establecido un cerco en torno al presunto responsable de la agresión que sufrió la medallista olímpica el pasado domingo.
La identidad del presunto policía y las otras tres personas que lo acompañaban no fue dada a conocer, debido a que son datos que la PGR guarda para no entorpecer la investigación.
Además, se informó que han solicitado a la Comisión de Seguridad Ciudadana (CESC) del Estado de México las imágenes de las cámaras de seguridad que pudieran haber captado el momento de la agresión contra la senadora, pero será responsabilidad de la Subprocuraduría de Control Regional, Procedimientos Penales y Amparo el posterior análisis de dichas grabaciones.
Por otro lado, Guevara dio a conocer que después de la agresión física se le han sumado varias amenazas y burlas en las redes sociales, particularmente en Twitter.
“En mis redes sociales, Twiter y Facebook, no solo en las direcciones personales sino, me informan, en la red social toda, mi caso se ha tornado para algunos en motivo de amenaza, burla, discriminación, escarnio de todo tipo, hasta elementos patológicos”, señala.
“Tuve oportunidad de ver algunos y con franqueza hay que admitir que la cultura de la violencia contra la mujer tiene raíces profundas en la civilización contemporánea”, dijo.
Por ello, Guevara propuso un punto de acuerdo en el que exhorta al Senado de la República a que inicie con una cruzada nacional contra la violencia hacia las mujeres.
“La intención de este punto de acuerdo es convocar a una gran mesa de trabajo con todas las entidades gubernamentales, sociales, organismos no gubernamentales, empresas de cualquier giro comercial y comunicativo, instituciones, universidades, centros de estudio, personalidades, empresas de redes sociales como Facebook y Twitter, blogueros, para concentrar energías, hacer un corte analítico de las condiciones de nuestro tiempo para, primero describir y después atacar condiciones, raíces, procesos, actitudes, costumbres que impulsen, mantengan o promuevan la violencia contra la mujer en cualquiera de sus manifestaciones”, informó la medallista olímpica.
Lee las notas completas en El Universal y Animal Político
Sé parte de la conversación