(14 de octubre, 2014).- José Luis Abarca solicitó licencia para ausentarse como presidente municipal de Iguala el 30 de septiembre. Cuatro días antes, fueron asesinados tres estudiantes y otros 43 desaparecieron a manos de la policía municipal.
A partir de entonces, se ha criticado a Iñaky Blanco, procurador del estado de Guerrero, por permitir la fuga del alcalde. En entrevista con MVS Radio, Ángel Aguirre, gobernador de la entidad, aseguró que meses antes de la desaparición de los normalistas, se había notificado a las autoridades federales sobre los nexos del ahora prófugo.
Según Aguirre, dos veces a la semana se realizaba una reunión de coordinación, en ella participaban representantes del ámbito federal y estatal. “Muchas veces, en el seno de estas reuniones, planteé el caso de Iguala, al igual que el de otros municipios. El delegado de la Procuraduría General de la República (PGR) me informó que ya había notificado a sus superiores y la averiguación contra Abarca estaba en curso”.
En las juntas mencionadas por Aguirre se encontraban presentes los jefes militares del estado y un delegado del CISEN. Así como el procurador estatal, el secretario general de gobierno y la presidenta del Tribunal Superior de Justicia.
Pese a que todos ellos estaban enterados de los vínculos oscuros entorno a la fortuna de Abarca y los señalamientos en su contra por el homicidio de Arturo Sánchez Cardona, nadie hizo nada.
Ángel Aguirre asegura que ordenó la detención del presidente municipal en cuanto ocurrió la desaparición de los normalistas, pero que Inaky Blanco le explicó que no se podía proceder contra él porque aún contaba con el fuero constitucional.
Ante el cuestionamiento de la periodista sobre por qué si existía una averiguación en la PGR no se detuvo al alcalde, Aguirre se limitó a decir que esa investigación era en el ámbito federal. “Puede entrevistar al delegado de la PGR, pregúntele cuántas veces hablé del caso Iguala”.
Las declaraciones del gobernador contrastan con las del Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, quien nunca ha hecho referencia a que la instancia a su cargo tuviera una averiguación previa del alcalde, pese a que, en palabras del gobernador Aguirre: “los vínculos de José Luis Abarca con el crimen organizado eran de dominio público”.
Fuente: Revolución 3.0
Sé parte de la conversación