En China, los exámenes duraban 3 días y algunos morían en el intento.
Durante siglos, los exámenes han sido los protagonistas de la pesadillas de muchas personas alrededor del mundo, incluidos aquellos que ahora ya no hacen exámenes, sino los aplican.
Tal es el caso de una profesora de Estudios Clásicos en la Universidad de Cambridge, quien en un artículo cuenta acerca de sus indagaciones sobre quién inventó los exámenes.
Aunque muchas culturas al rededor del mundo ya realizaban estas evaluaciones, varias eran de forma oral. La invención de los exámenes escritos se la debemos a la antigua China.
El sistema de examen imperial chino -como se llamaba- duraba 3 días y noches, y versaba más que todo sobre clásicos de Confucio. Y a quienes no lograban llegar al final y morían en el intento, los tiraban del otro lado de los muros que rodeaban el complejo.
De acuerdo con el artículo, al crear esos primeros exámenes no estaban sólo separando la paja del trigo, sino tratando de hacerlo según una medida justa de las habilidades, no de acuerdo a la posición social o riqueza del candidato.
Aunque actualmente, las personas ya no muere en los exámenes, la finalidad de éstos sigue siendo probar las habilidades de quienes los presentan, probar la capacidad como profesionales. Sin embargo no siempre siempre, quien obtiene el mejor resultado en los exámenes es necesariamente el mejor.
Según Simon Goldhill, director de Estudios Clásicos en King’s College, Londres, si los exámenes no sirven necesariamente para mostrar quienes son los mejores, “para lo que sí sirven, en mi opinión, es para prepararte para muchas cosas en la vida: si te va muy bien en los exámenes, te puede ir bien en otras cosas”
Vemos entonces, que lo exámenes no son del todo un sistema perfecto, sin embargo hasta el momento no existe una mejor manera para evaluar al hombre en distintos aspectos. Por lo que sólo nos queda relajarnos.
Fuente: Animal político
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