Con 1,8 km de mozzarella, salsa, albahaca y el secreto de los 100 chefs de Nápoles que se dieron el gusto de entrar al libro de los récords mundiales.
En medio de una guerra de recetas, donde lo que más importaba eran las cantidades en los ingredientes. Debían ser “astronómicas” para que así los chefs de Nápoles, le arrebataran a los de Milán el récord de la pizza más larga del mundo. Y así fue. La victoria fue para los napolitanos, con 1.858,88 metros de la especialidad de ese puerto del sur de Italia que le ganaron a los 1.595,45 metros de pizza con la que los milaneses habían entrado al libro Récord Guinness en 2015.
La gran pizza necesitó dos toneladas de harina, 1.600 kg de tomates, dos toneladas de mozzarella, 200 litros de aceite y 30 kg de albahaca, “100% made in Italy”, precisó Coldiretti, la principal organización agrícola de Italia, más de 200 pizzeros participaron en su realización y fueron necesarios cinco hornos a leña para su cocción.
Gracias a este evento, las asociaciones napolitanas esperan promover la inscripción del ‘savoir faire’ de los pizzeros napolitanos en el patrimonio cultural inmaterial de la Unesco. Coldiretti, que contribuyó a difundir la petición, anunció en marzo que ya recogieron cerca de un millón de firmas.
Alessandro Marinacci, el chef encargado del evento, dijo que este récord es un “orgullo” para la ciudad de Nápoles, asociada fuertemente con la pizza. La receta clásica con pomodoro (tomate), mozzarella, basilico (albahaca) está asociada al chef Rafaelle Esposito, quien cocinó una pizza de este tipo en 1889 para la reina de Bourbon, Regina Margherita.
Fuente:Clarín.
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