Como ya es viernes, llego el momento de olvidarnos de todo el estrés de la semana, para rejuvenecer y reunir energías para el fin de semana.
Una ducha reconfortante, un masaje casero, estirarte antes de dormir… ¿Cómo acabar con el estrés acumulado? Pues con unos rituales beauty y algún hábito saludable. Pequeños gestos con los que podrás alcanzar el ansiado estado zen que tanto necesitas.
1. Aromaterapia en el baño. Para empezar el día, nada mejor que el subidón que da una ducha con un gel aromático de textura cremosa. ¡Disfrútalo!
2. El poder de una infusión. Toma en ayunas una tisana con jengibre y zumo de limón. Es un excelente estimulante.
3. Despierta los sentidos. Hay fragancias con cítricos (pomelo, limón, mandarina…) que mejoran el estado de ánimo y te llenan de dinamismo. ¡Pulveriza sobre tu piel y listo!
4. Haz una parada. ¡Qué agobio! ¡Cuánto trabajo! Stop: concédete unos minutos y empléalos en respirar, mientras proyectas en tu mente imágenes que te tranquilicen (una playa desierta, agua fluyendo…).
5. Vitamínate sin sumar calorías. Si te aburre la fruta, una opción sana es tomar el tentempié de moda, un smoothie. Victoria Llorente nos da una receta antioxidante: “Tritura una taza de frutos rojos con leche de almendras, una cucharada de cacao puro y miel”.
6. Descasa los ojos. Dolor de cabeza, vista cansada, lagrimeo… Refresca la mirada con un antifaz de gel frío. ¡Desinflama y calma en un paso!
7. Mima tus pies. Los sometemos a largas caminatas, los hacemos sufrir sobre unos tacones de vértigo… Los pies necesitan un protocolo a medida: exfolia, sumerge en agua tibia con sales de baño e hidrata.
8. Momento automasaje. ¿No tienes hueco en la agenda para ir al salón de belleza y darte un buen masaje? Alíate con los aparatos de automasaje, que alivian todo tipo de dolencias musculares.
9. Relaja el cuero cabelludo. Si al final de una larga jornada te notas fatigada y con la cabeza embotada, date un masaje capilar. Empieza en la nuca (en el nacimiento del pelo), haciendo suaves presiones con las yemas de los dedos, y sube hacia la frente con movimientos circulares. ¡Notarás un alivio inmediato!
10. ¡Dulces sueños! Estírate antes de irte a la cama: mejora la lubricación de articulaciones y músculos y previene la aparición de contracturas.
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