La bomba centrífuga es un tipo de bomba hidráulica que transforma la energía mecánica en energía cinética de presión a un fluido. La bomba centrífuga aumenta la velocidad de los fluidos para que estos puedan desplazarse a largas distancias.
Por sus características, la bomba centrífuga es parte de las bombas hidráulicas de mayor aplicación dentro de la industria. Esto sucede porque son las más utilizadas para bombear líquidos en general y permiten movilizar grandes cantidades de agua.
Sin dudas, muchos sectores industriales precisan usar bomba centrífuga en sus procesos mecánicos. Los sectores que más la utilizan son los de la industria química, el sector automotriz y la industria alimentaria.
¿Cómo funciona una bomba centrífuga?
Al descubrir qué es una bomba centrífuga, vale la pena conocer cómo funciona una de ellas.
Estas bombas de fluidos funcionan de la siguiente manera:
El fluido o el agua ingresa por el centro de una canalización, que se encuentra en la parte superior de la bomba y lleva el nombre de rodete o impulsor. Gracias a la energía externa que recibe, la fuerza centrífuga que produce la bomba hace que ese fluido se desplace con una fuerte presión hacia el exterior y la tome en la carcasa o cuerpo de la bomba.
La estructura interna de esta bomba sanitaria genera que el fluido termine saliendo hacia el exterior por medio de una tubería de salida.
Las bombas centrífugas son máquinas generadoras que facilitan la circulación de los fluidos de forma que logren vencer la mayor presión a la que deben enfrentarse. Los fluidos no precisan de ninguna energía extra al momento que tienen que pasar de un sitio donde hay más presión a uno donde haya menos.
¿Para qué sirve una bomba centrífuga?
Cuando llegue el momento de saber cómo seleccionar una bomba centrífuga, es importante conocer para qué sirve una bomba centrífuga.
La bomba centrífuga se utiliza para trasegar líquidos por medio de la energía hidráulica que genera. Por lo general, se usa para provocar que una corriente de agua fluya y los líquidos tengan el funcionamiento adecuado.
En la actualidad, la bomba centrífuga es el equipamiento más utilizado para impulsar agua u otros fluidos como los combustibles. Pueden estar presentes en sistemas de riego, distribución de agua potable y en fábricas o industrias de todo tipo.
¿Cuáles son las partes de una bomba centrífuga?
La bomba centrífuga está constituida por los siguientes elementos:
Carcasa: esta es la parte que protege a todos los mecanismos internos que permiten que la bomba entre en acción. Está elaborada con distintos materiales según su finalidad.
Entrada y salida: son los conductos por los que circula el agua. El de entrada se lo conoce como tubería y el de salida como tubería de impulsión.
Impulsor o rodete: son los dispositivos que se usan para impulsar el agua contenida en la carcasa. Están conformados por una serie de álabes de diversas formas que giran dentro de una carcasa circular. El rodete va unido al eje y es la parte móvil de la bomba.
Difusor: el difusor, junto con el rodete, están encerrados en una cámara, cuyo nombre es carcasa o cuerpo de bomba. Está formado por unos álabes fijos divergentes que, al incrementarse la sección de la carcasa, la velocidad del agua irá disminuyendo. Esto contribuye a la transformación de la energía cinética en energía de presión, mejorando el rendimiento de la bomba.
Eje: es el elemento que sostiene el impulsor para que gire sobre este con la fuerza del motor. Según la posición del eje, hay bombas de eje horizontal y de eje vertical.
Cojinetes o rodamientos: son las piezas que sostienen de modo adecuado el eje del impulsor.
Motor: este es el componente fundamental de la bomba centrífuga. Además, permite mover el eje y, a su vez, el impulsor para conseguir el movimiento del agua. Según su potencia, podrá movilizar más agua en menos tiempo.
Panel de control: es el dispositivo que permite el accionar de la bomba.
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