Ni los pobladores de Santa Ana ni AMLO traían cubrebocas cuando se saludaron
En medio de la alerta sanitaria por la pandemia de coronavirus, el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien no portaba cubrebocas, saludó de mano a varias personas que se lo pidieron.
El mandatario se bajó de su camioneta para fotografiarse con simpatizantes y recibir algunos obsequios como un sombrero de palma, botellas de mezcal y un guajolote, durante su gira de trabajo por Oaxaca, detalló El Universal.
Luego de terminar la ceremonia de entrega del camino rural en la comunidad de Santa Ana, el político tabasqueño bajó el vidrio y agradeció a los pobladores que lo despedían con música tradicional.
En esos instantes dos personas le entregaron una botella de mezcal que ellos mismos producen y un sombrero de palma.
También se acercó una persona, de nombre Fernando Martínez, para informarle a López Obrador que buscaría ser presidente municipal por la vía independiente, noticia que no fue del agrado del Ejecutivo federal. Momentos después una mujer, lo saludo de mano y le exclamó que quería bailar con él:
“Yo quería echarme un bailongo, un zapateado, contigo”, le dijo la pobladora, a lo que Andrés le respondió “¡Mi amor!”.
Metros más delante de su camino lo esperaba otro grupo de personas, entre ella una mujer de la tercera edad que, en agradecimiento por la construcción del camino inaugurado, le entregó una botella de mezcal y un guajolote.
Fue tal su emoción que el presidente de México decidió bajarse del vehículo y tomarse fotografías con los habitantes de Santa Ana, posteriormente regresó y pidió disculpas a quienes le pedían tomarse más fotos, “es que me lo tienen prohibido”, manifestó.
Cabe mencionar que ninguno de los pobladores que se acercaron a López Obrador, ni el propio mandatario traían cubrebocas, ni respetaron la sana distancia.
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