Las mujeres lograron proveer de luz artificial y agua a sus pueblos
Instalaron 46 paneles solares de 375 watts de potencia cada uno, en el pozo que abastece de agua a El Desemboque
Un grupo de mujeres indígenas provenientes del desierto de Sonora viajó a la India en 2016, para capacitarse en energía solar y con ello diseñar un proyecto.
A su regreso, y casi cuatro años después, las mujeres lograron materializar su sueño: proveer de luz artificial y agua a sus pueblos.
Son Verónica Molina, Cecilia Moreno y las hermanas Francisca y Guillermina Barnett, quienes se instalaron por seis meses en el país asiático y dejaron a sus respectivas familias, ubicadas en El Desemboque de los Seris y en Punta Chueca, dos pueblos que integran a la Nación Comcáac.
Su objetivo era capacitarse y crear un plan que beneficiara sus comunidades, y lo lograron en junio de 2020, tras solicitar el apoyo de mucha gente.
Las mujeres instalaron 46 paneles solares de 375 watts de potencia cada uno, en el pozo que abastece de agua a El Desemboque, con la finalidad de que funcione con energía solar y ya no depender de la luz eléctrica.
Cabe señalar que antes de este proyecto, los recibos por el servicio eléctrico se volvieron impagables y se acumularon uno tras otro, lo que llevó a que los pobladores se quedaran sin acceso al agua en incontables ocasiones.
“Es lo que se batalla más aquí, con el agua, por el alto costo de la energía”, explicó Verónica en mensajes referidos por el portal noticioso SinEmbargo.
“También, en épocas de lluvias, se cortaba la luz y no teníamos agua: a veces hasta medio año sin tener agua en el pueblo”, agregó.
“Nosotras dos de El Desemboque -Vero y Cecy- fuimos (a India) con la idea de poder hacer algo en el pozo de la comunidad”, dijo Vero, quien detalló que “actualmente ya se están poniendo los paneles solares; nos ayudó una amiga gran norteamericana, Laura Monti, que ella consiguió el financiamiento con el fin de ayudarnos”.
Otro aporte del 30 por ciento, alrededor de 253 mil pesos, provino del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) para el proyecto inicial que se complementó con los recursos de la organización no gubernamental Borderlands Restoration Networks, liderada por Monti.
“Hemos tenido esta conciencia de que la falta de agua en el pueblo es la raíz de muchos otros problemas y enfermedades”, comentó Laura en una llamada telefónica.
“Estas mujeres han sido líderes en la comunidad, fueron hasta la India e hicieron un esfuerzo grande para entrenarse: llegaron con el plan de instalar paneles en las casas y de hacer lámparas. Son mujeres muy dedicadas, comprometidas y, cuando surgió lo de estos fondos, se pusieron muy contentas porque sabían que será un gran beneficio para el pueblo”, añadió.
Cabe señalar que el proyecto es más amplio, ya que en una primera etapa se instalaron los paneles en el pozo de El Desemboque.
Sin embargo, en la segunda fase se busca electrificar 30 casas de la comunidad, en donde también se instalarán huertos para autoconsumo, un proceso que iniciará en unas dos semanas más.
Además, en una tercera fase se pretende llevar energía solar a las casas de otro pueblo en Punta Chueca, con el fin de ahorrar en este servicio que se paga cada mes a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“La segunda fase del proyecto es electrificar unas 30 viviendas de aquí del pueblo y, aunque sí va a estar conectado también con la energía de la CFE, pagará menos luz la gente que tendrá paneles solares, porque si es alto el costo de la luz”, explicó Vero Molina.
“Algunas familias no pueden pagarla porque no tienen un sueldo fijo y algunas familias no tienen trabajo: hay mujeres viudas, mujeres solas que nadie trabaja por ellas y les es difícil pagar la luz”, agregó.
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