Un grupo de autodefensa y una célula criminal se pelean 7 zonas rurales
Por su parte, el gobernador Astudillo afirmó que en estos días se realizará un balance sobre el número de escuelas cerradas y la población estudiantil afectada
El conflicto armado entre la guardia comunitaria de la UPOEG con el grupo criminal de Los Ardillos, ha causado el cierre de escuelas de todos los niveles educativos de siete comunidades localizadas en el valle de El Ocotito, área rural del municipio de Chilpancingo, Guerrero.
Desde hace algunos días, se ha reportado el cierre gradual de instituciones educativas en las localidades de Acahuizotla, Palo Blanco, Mohoneras, Buena Vista de la Salud, Cajelitos, El Ocotito y Rincón de la vía, luego de los enfrentamientos entre ambos grupos armados los cuales empezaron el pasado domingo 26 de noviembre, de acuerdo con información del gobierno municipal, referida por Proceso.
La palea entre la UPOEG y Los Ardillos por el control del valle de El Ocotito, en donde el Ejército ha desmantelado laboratorios de heroína y droga sintética, ha dejado un saldo de dos civiles muertos, otros dos heridos, además del decomiso de armas, granadas y camionetas blindadas en las cuales se desplazan pobladores y delincuentes.
Por su parte, el gobernador Héctor Astudillo Flores, quien prometió orden y paz en su campaña, se burló de las células de autodefensa, las cuales asumieron el control de la seguridad en esa área del estado debido a la ineficacia de las autoridades.
“¿Y los que pregonaban que brindaban seguridad, dónde están?”, preguntó y añadió:
“Hay un conflicto entre dos grupos que, sin duda, está urgiendo la responsabilidad de la Federación y vamos a ir porque es nuestra responsabilidad”.
Acerca de cuántas escuelas se han cerrado y la población estudiantil afectada por la violencia, Astudillo aseguró que en estos días se llevará a cabo un balance en la zona para conocer estos datos.
Mientras tanto, el comandante de la UPOEG, Ernesto Gallardo confirmó la batalla del grupo de Los Ardillos e informó que desde el miércoles pasado se desplegaron guardias comunitarias de la región de Costa Chica para garantizar la paz en el valle de El Ocotito.
Las siete comunidades peleadas por la UPOEG y Los Ardillos se ubican al sur de la capital de la entidad sobre la transitada carretera federal México-Acapulco, en donde hay retenes de comunitarios a lo largo de por lo menos 50 kilómetros.
De acuerdo con reportes oficiales, la confrontación tiene el propósito de lograr el dominio de la zona de producción y trasiego de heroína la cual abastece el mercado ilegal de drogas en México y Estados Unidos.
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