El hombre y su esposa disfrutaban de un crucero por la costa de Alaska
Aceptó su crimen al ser encontrado con las manos llenas de sangre
Un hombre de 39 años de edad, originario de Utah, Estados Unidos, asesinó a su esposa durante un crucero que recorría la costa de Alaska porque no dejaba de reirse
Un amigo de la víctima lo encontró en su recámara con las manos y la ropa llena de sangre.
El agresor, identificado como Keth Manzanares, aceptó haber cometido el delito. Dijo que mató a Kristy, su esposa y madre de sus tres hijos, porque “no dejaba de reirse”.
Al ser cuestionado por elementos del FBI, el asesino se limitó a decir que “su vida había acabado”. Además las autoridades locales aseguraron que el sujeto no tenía antecedentes penales.
Lee la nota completa en SDP Noticias
Sé parte de la conversación